FUENTE: Redacción Médica
Tras las apariciones publicadas hoy en los medios de comunicación sobre que el Hospital General no piensa rescindir los contratos que mantiene con las empresas de la UTE Akasa: Connectall Systems y Kanbanlog, ambas investigadas tras la operación policial iniciada por la Unidad Central de Delincuencia Económica y Fiscal, el Colegio de Farmacéuticos de Valencia (Micof) exige a Sanidad el cese inmediato del programa Akasa y que se investigue éste.
En este sentido, señala el Micof que "si no se cesa la actividad desde el Colegio consideran que la Conselleria de Sanitat está siendo “corresponsable” puesto que deja que sigan funcionando con normalidad empresas investigadas por presuntos casos de corrupción".
El Micof, a través de un escrito remitido a la Conselleria de Sanitat el pasado 29 de marzo, ya solicitó la paralización del Programa Akasa tras detectarse que las dos empresas de la UTE Akasa: Connectall Systems y Kanbanlog, estaban siendo b
Asimismo, los farmacéuticos de las zonas afectadas, que en diciembre de 2016 ya pidieron la revocación de dicho programa, enviaron una nueva petición que fue registrada el pasado 28 de marzo en las dependencias de laConsejería de Sanidad. Sin embargo, hasta el momento la consejera, Carmen Montón, no se ha manifestado al respecto.
Jaime Giner, presidente del Micof, ha manifestado su malestar ante el silencio de la consellera y ha incidido en que es “inadmisible que la Conselleria y el Hospital General continúen trabajando con las empresas investigadas en presuntas tramas de corrupción”. Por ello, Giner solicita una respuesta y que “la consejera explique públicamente los motivos por los que aún no ha cesado el proyecto ni ha iniciado una investigación, porque si no lo paraliza se convierte en cómplice, ya que fue su Consejería la adjudicataria”.
El programa Akasa nació como un proyecto piloto en el año 2013 impulsado por la Consejería de Sanidad para la distribución a domicilio de pañales de incontinencia y productos dietoterápicos a personas mayores y dependientes. Desde su implantación el MICOF ha manifestado siempre su disconformidad dado que el ahorro anunciado por el Consell no era real.