FUENTE: Expansión
Humira, el fármaco para tratar la artritis reumatoide, se mantiene como el medicamento que más factura en el mundo. Esta terapia biológica aportó a la biotecnológica norteamericana Abbvie, su propietario, unos ingresos de 8.834 millones de dólares en los seis primeros meses del año, un 14,3% más. Éste es el fármaco más demandado, en valor, del grupo, a gran distancia de su segundo más vendido (Imbruvica, indicado contra el linfoma, que aportó 1.177 millones, un 43% más).
De hecho, Humira crece en mayor proporción que los ingresos de Abbvie, que fueron de 13.482 millones de dólares (+0,2%). Las ventas del fármaco en Estados Unidos han crecido un 20% este año, pese a que allí la patente expiró a finales de 2016, debido en parte a la subida de precios (el tratamiento ronda los 4.400 dólares). Ya en 2016 Humira ingresó 16.078 millones de dólares a nivel mundial, un 24% más, el doble de lo que crecieron las ventas de Abbvie. En el primer semestre, Humira supuso el 65% de la facturación del grupo.
Los 30 medicamentos que más facturan en el mundo aportaron entre enero y junio de 2017 38.466 millones de dólares (32.681 millones de euros) a las farmacéuticas. Esto supone un 4,6% más gracias, en gran medida, a la protección de la patente y su precio. Además, la mayoría de ellos son fármacos biológicos, que para su fabricación necesitan organismos vivos, frente a los medicamentos de síntesis química. Esta característica hace que sean más costosos de investigar y de fabricar, lo que, sumado a que están dirigidos a nichos de mercado específicos, hace que reporten elevados márgenes.
La artritris y el cáncer son las indicaciones que se reparten los primeros puestos del top de ventas. Mabthera/Rituxan, el medicamento de la suiza Roche contra el linfoma, es el segundo más vendido, al ingresar un 3% más (3.958 millones de dólares). En tercera posición, Revlimid (contra el mieloma) de la biotech americana Celgene, que al subir un 19,7% sus ventas, hasta 3.918 millones de dólares en el semestre, se aproxima a Roche. Ambos relegan a la cuarta posición a Enbrel, el antiinflamatorio para tratar la artritis, cuya comercialización se reparten según las zonas geográficas Amgen y Pfizer. Su facturación bajó casi un 12%. Para Amgen, que sólo lo comercializa en Estados Unidos y Canadá, los ingresos bajaron un 7,7%; para Pfizer, un 20%. Enbrel perdió la patente en Europa en 2015.
Entre los compuestos que más elevan sus ingresos figura el cardiovascular Eliquis (indicado en Europa para reducir el riesgo de ictus y embolia) de Bristol Myers-Squibb (BMS) y Pfizer, que crece un 50% y se incorpora a los diez primeros de la lista.
También sube Epclusa. El fármaco para la hepatitis C de Gilead pasa de facturar 64 millones a más de 2.000 millones de dólares. Su crecimiento contrasta con otra terapia para combatir la hepatitis C del mismo grupo, Harvoni, cuyas ventas caen a la mitad.
Lantus, la insulina contra la diabetes de Sanofi, se mantiene entre los más vendidos, aunque su facturación bajó un 15%. Pfizer sitúa cinco fármacos entre los treinta primeros. Además de Enbrel y Eliquis, figura Prevenar 13, la vacuna contra el neumococo que es el medicamento que más ingresos aporta al grupo neoyorquino, 2.526 millones de dólares. También Lyrica, indicado contra el dolor neuropático, la ansiedad y la epilepsia, y que fue en su día uno de sus grandes superventas, además del anticancerígeno Ibrance que, con 1.532 millones, creció un 63%.
Cuatro colocan Johnson & Johnson (entre ellos el blockbuster Remicade y Xarelto, en colaboración con Bayer) y Gilead, encabezados por Harvoni (hepatitis C).
Si los medicamentos para combatir el colesterol casi han desaparecido de los treinta primeros, surgen nuevos tratamientos para combatir enfermedades que han dejado de ser consideradas raras por el aumento de la prevalencia entre la población gracias al diagnóstico temprano. Es el caso de la esclerosis múltiple. Tecfidera de Biogen y Gilenya de Novartis figuran en la lista, elevando sus ingresos un 7% y un 3,3%, respectivamente. Destaca, asimismo, la presencia de tres fármacos para el tratamiento y prevención del VIH: Genvoya, Truvada y Triumeq. Los dos primeros pertenecen a Gilead y el tercero a GSK. Genvoya, aprobado en Estados Unidos y Europa a finales de 2015, ha cuadruplicado sus ventas.