FUENTE: La Vanguardia
Inyectar virus en un tumor ayuda a atraer células inmunitarias y mejora la eficacia del tratamiento de inmunoterapia contra el cáncer, según un ensayo clínico liderado por Antoni Ribas, de la Universidad de California en Los Ángeles.
La estrategia se ha ensayado en 21 pacientes que tenían melanoma con metástasis. De ellos, un 33% ha tenido lo que los oncólogos llaman una respuesta completa: un año y medio después de iniciar el tratamiento, no tienen ningún rastro detectable de cáncer. otro 29% ha tenido una respuesta parcial: la enfermedad ha remitido sin llegar a desaparecer por completo.
Si estos resultados se confirman en un estudio más amplio, que ya está en curso y en el que participan 660 pacientes, se dispondría por primera vez de un tratamiento eficaz para la mayoría de casos de melanoma con metástasis. En la actualidad, responden a los tratamientos alrededor de un tercio de los pacientes.
El oncólogo Antoni Ribas, afincado en Los Ángeles, dirige la investigación
Además, “la misma estrategia puede ser útil para mejorar el tratamiento de otros cánceres”, declara Antoni Ribas. Entre ellos, cita “los de cabeza y cuello, los linfomas o algunos de mama”.
El estudio parte de la observación de que los fármacos de inmunoterapia contra el cáncer sólo funcionan en una minoría de pacientes, aunque en estos casos suelen dar muy buen resultado. Su eficacia se basa en facilitar que las células inmunitarias ataquen las tumorales.
Para que estos fármacos actúen, es necesario que haya células inmunitarias en un tumor. Una investigación anterior mostró que, en pacientes que no responden a la inmunoterapia, los tumores tienen un déficit de estas células.
Ribas razonó que, si se pueden atraer más células inmunitarias al tumor, será más probable que la inmunoterapia funcione. Para ello recurrió a un virus llamado T-VEC, diseñado en laboratorio para multiplicarse en células tumorales y estimular una respuesta inmunitaria. Este virus ha demostrado tener una acción antitumoral y está aprobado en EE.UU. para el tratamiento del melanoma.
El nuevo estudio, en el que ha participado el hospital Clínic de Barcelona, ha consistido en inyectar el virus en un tumor de los pacientes e iniciar seis semanas más tarde el tratamiento de inmunoterapia con el fármaco pembrolizumab. “Teníamos una hipótesis sobre cómo estos dos tratamientos funcionarían juntos y, cuando hicimos biopsias de los tumores de los pacientes, nos encontramos con que cooperaban exactamente tal como esperábamos”, declara Ribas.
Se espera que la terapia, que se ha estudiado con el melanoma, sea eficaz en otros tumores
Según los resultados presentados en la revista Cell, la cantidad de células inmunitarias presentes en los tumores aumentó después de inyectarles el virus T-VEC. Concretamente, aumentó un tipo de células llamadas linfocitos T CD8+.
Asimismo, el aumento de estas células en los tumores se correspondió con una mejor respuesta al tratamiento de inmunoterapia con pembrolizumab.
Y, un resultado especialmente importante, se registró un aumento de estas células inmunitarias circulando en la sangre. Esto explica que el tratamiento fuera eficaz no sólo en el tumor en que se había inyectado el virus sino también en las metástasis.
Todo ello, sin efectos secundarios graves que obligaran a interrumpir el tratamiento en ningún paciente.
Pese a estos resultados positivos, Ribas advierte que “sólo un ensayo clínico de fase 3 podrá demostrar de manera definitiva la eficacia del tratamiento”.
El estudio supone un hito para la revista Cell, la publicación más importante del mundo en ciencias de la vida. La dirección de Cell, que publica un ensayo clínico por primera vez en su historia, ha elegido el trabajo de Ribas para inaugurar su apuesta por investigaciones médicas. Según el oncólogo, esto se explica por la evolución de la biomedicina, ya que “una parte importante de los avances que antes se hacían primero en moscas, gusanos o ratones hoy día se hacen directamente en pacientes”.