Fuente: El Mundo
La mala visión es uno de los principales factores de riesgo al volante. Sin embargo, más de dos millones de españoles conducen sabiendo que su vista no está en plenas facultades. Ésta es una de las conclusiones del estudio Visión y Conducción: hábitos y percepciones sobre el impacto de la visión en la seguridad vial, elaborado por el Grupo Essilor, la FIA, el RACE y Cepsa.
La investigación ha sido realizada con más de 3.000 conductores. El 92% considera que su visión está en plenas o buenas facultades, pero el 8% reconoce que circula sabiendo que tiene problemas de visión (dos millones de un censo de conductores de la DGT de 26).
El 50% reconoce no haberse revisado la vista en el último año. Además uno de cada tres ignora que su visión puede afectar a la seguridad en carretera. El estudio manifiesta la poca relevancia que le dan a la visión a la hora de preparar un viaje en coche. Mientras que el 71% revisa sus neumáticos y el 56% el aceite del coche, el 70% nunca ha revisado su vista antes de un desplazamiento largo por carretera, precisamente, los viajes que se hacen en estas fechas.
Los conductores no comprueban la vista pero tampoco hacen paradas para evitar la fatiga visual. Tráfico recomienda hacer una pausa cada 150 o 200 kilómetros. El 72% de los automovilistas reconoce que nunca la realiza, cifra que alcanza el 80% en los mayores de 56 años, donde la fatiga y la falta de reflejos se acentúan.
Los deslumbramientos en carretera son otro de los peligros. Cerca del 80% de los encuestados afirma haberlos sufrido al volante y tres de cada cuatro reconocen que esta situación ha afectado a la seguridad vial. La mitad de los conductores no utiliza gafas de sol polarizadas.
Para concienciar sobre estos riesgos, todos los que paren en una estación de servicio de Cepsa durante julio y agosto tendrán información sobre cómo revisar y proteger la visión en la conducción.