FUENTE: La Razón
Un equipo de cirujanos del Hospital Ochoa de Málaga ha logrado implantar con éxito la primera prótesis de rodilla totalmente personalizada y realizada en tres dimensiones en un procedimiento pionero en España. Al frente de esta operación «a la vanguardia» se situó el prestigioso traumatólogo Ignatios Chatziandreou, según informó ayer el centro marbellí en un comunicado.
«La primera parte de la intervención es como otras cirugías de rodilla en las que se miden los cortes de manera milimétrica, pero con la gran novedad de que la prótesis que se implanta en esta operación es una copia exacta a la del paciente», indicó el doctor, que también añadió que esta prótesis «ha quedado justo al nivel del hueso del paciente ajustado como un guante». ¿Cuál es la gran ventaja de este novedoso procedimiento? «Que la articulación del paciente se mantiene con su propia anatomía, algo que no sucede con una prótesis estándar».
Entre otras cosas, la recuperación en este tipo de operaciones es mucho más rápida que la que se necesita en las intervenciones tradicionales. Esta técnica se llevó a cabo por primera vez hace doce años en Estados Unidos y en Alemania es usual desde hace siete. «Con esta prótesis milimétrica el riesgo de que se ponga en mala posición es mucho menor y el movimiento para el paciente es mejor, así como el juego ligamentoso, que mantiene el que tenía antes de la operación con un movimiento natural», subrayó el doctor Chatziandreou, que ya había realizado este procedimiento quirúrgico en más de 300 ocasiones en Alemania entre los años 2002 y 2015.
Según los facultativos encargados del caso en el Hospital Ochoa de la localidad malagueña, esta técnica reduce también el riesgo de sufrir dolor, molestias o movimientos poco naturales. De hecho, un estudio conducido por el propio cirujano en el Hospital Klinikum Dormund confirma que las dolencias se reducen de un 25 por ciento a un 4,8.
Los principales beneficiados de este paso adelante en la medicina española serán los enfermos con artrosis severa, que en función de la dolencia podrán requerir una prótesis unicompartimental o total. Por norma general, su media de edad suele rondar los 60 años, aunque en algunos casos baja hasta los 40. La intervención dura aproximadamente una hora y se puede realizar con anestesia general o solo con epidural en función del caso.
Los tiempos invitan a ser optimistas. Tras la operación, el ingreso hospitalario dura tan solo unos pocos días, pero el paciente empieza a andar 24 horas después de salir del quirófano. El tiempo estimado hasta que se alcanza la recuperación total es de alrededor de cuatro semanas.