FUENTE: La Razón

Desde la Sociedad Española de Cardiología (SEC) ponen como ejemplo los buenos resultados de la ley antitabaco para reducir el impacto de este hábito en la salud, «y como el mensaje de la vida saludable no termina de calar en la población adulta, habrá que ir a la infancia, a la educación desde pequeños. Hay que insistir en la medidas nutricionales, a través de la prohibición de determinados alimentos en las escuelas, y en la necesidad de aumentar el ejercicios físico, que detectamos que se reducen las horas en el colegio», explicó rotundo el presidente de la SEC, Manuel Anguita, con motivo de la cita anual de estos profesionales, que estos días tiene lugar en Sevilla.

Las enfermedades del corazón son la primera causa de muerte en España, con un 29,17%, frente a las producidas por tumores que son un 27,5% y las respiratorias que son un 11,4%. Lo positivo es que desde 2012 se ha reducido en un punto los fallecimientos y esto es el resultado de la buena atención médica cardiovascular que hay en nuestro país. Lo negativo pone el acento en que los pacientes, y los ciudadanos sanos, no optan por cambiar sus hábitos y la enfermedad cardiovascular se hace más presente cada día.

Actualmente, hay programas que han desarrollado en las sociedad que están en marcha y que funcionan bastante bien, como explica Anguita. «Tenemos en marcha el programa LATE, para reducir la muerte súbita y hay muchas autonomías que ya están en ello y han legislado el uso de desfibriladores. También tenemos que hacer mella en la parte educativa en la que tenemos que dar pasos importantes», concluye Anguita.

Además, en la cita, el presidente de la SEC explicó que España se sitúa en el rango inferior en la disponibilidad de cardiólogos entre los países europeos con servicios nacionales de salud. La tasa actual es de 5,7-6 profesionales por 100.000 habitantes. «El objetivo sería crecer moderadamente, hasta un 10%, en tasa de facultativos, siempre que el SNS incremente su eficiencia», añade Anguita.