FUENTE: Las Provincias
¿El cáncer huele? Una investigación estadounidense ha demostrado que el olfato de los perros puede tener una precisión del 97% en la detección del cáncer de pulmón, la principal causa de muerte por cáncer en todo el mundo, tanto para mujeres como para hombres.
La agudeza olfativa de un perro es al menos 10.000 veces más sensible que la de un humano, lo que probablemente se debe a su epitelio y receptores olfativos. El estudio, realizado por miembros del Colegio de Medicina Osteopática de Lake Erie, se realizó con tres beagles de dos años que no habían sido entrenados previamente para detectar muestras de cáncer de pulmón. Todos ellos demostraron con éxito su capacidad de identificar dicha enfermedad a través del olor, un primer paso para identificar biomarcadores específicos para la enfermedad. Esta raza fue elegida por su extraordinario sentido del olfato -los beagle tienen 225 millones de receptores olfativos en comparación con los 5 millones que tienen los humanos-.
Después de ocho semanas de entrenamiento, los beagles pudieron distinguir entre muestras de suero sanguíneo tomadas de pacientes con cáncer de pulmón de células no pequeñas, un tipo de cáncer de pulmón que es más fácil de tratar si se detecta en una fase temprana, y pacientes sanos. Se utilizaron muestras de 10 donantes, 6 mujeres y 4 hombres, con edades comprendidas entre los 26 y 80 años. Las muestras de donantes femeninas provinieron de tres mujeres negras, 2 mujeres blancas y 1 mujer hispana. Las muestras de donantes masculinos provinieron de 2 hombres negros, 1 hombre blanco y 1 hombre de raza mixta.
Para la ejecución de la prueba, los perros fueron llevados a una habitación con muestras de suero sanguíneo al nivel de la nariz. Después de oler bien una muestra, si los perros detectaban un hallazgo positivo de cáncer se sentaban frente a ella, si no, continuaban a la siguiente.
El doctor Quinn, autor principal del estudio, y su equipo, están a punto de completar una segunda fase de la investigación. Esta vez, los perros están trabajando para identificar el cáncer de pulmón, mama y colorrectal utilizando muestras de la respiración de los pacientes, recogidas por el paciente respirando en una máscara facial.
El siguiente paso será fraccionar aún más las muestras en función de las propiedades físicas y químicas, presentándolas a los perros hasta que se identifiquen los biomarcadores específicos para cada cáncer. El objetivo es desarrollar un producto de detección sin receta, similar a una prueba de embarazo, en términos de costo, simplicidad y disponibilidad. El doctor Quinn visualiza un dispositivo que alguien puede respirar y ver un cambio de color para indicar un resultado positivo o negativo.
A nivel mundial, este cáncer afecta a 1,6 millones de personas cada año y deja tras de sí 1,3 millones de muertes, según datos del Grupo Español de Cáncer de Pulmón. En España, más de 400.000 personas han muerto por su causa en los últimos veinte años, con una media de 21.200 muertes anuales a causa de esta patolgía, un 82% hombres y un 17% mujeres. Los investigadores sostienen que las habilidades de los perros pueden llevar al desarrollo de medios efectivos, seguros y económicos para la detección masiva del cáncer. «En este momento, parece que los perros tienen una mejor capacidad natural para detectar el cáncer que nuestra tecnología más avanzada», expresa el doctor Quin, «una vez que descubramos lo que saben y cómo, podremos ponernos al día», concluye el experto.