Desde el MICOF os recomendamos siempre acudir a vuestro farmacéutico antes de comenzar cualquier tipo de tratamiento. No obstante, os dejamos algunos consejos que os pueden resultar de utilidad:
Cómo evitar los piojos
Para evitar la infestación debemos revisar frecuentemente la cabeza de los niños (sobre todo detrás de las orejas y en la nuca) y pasar la liendrera (peine de púas muy juntas). Sus liendres son huevos blancos pegados a la base del pelo (no se desprenden fácilmente como la caspa).
Cómo actuar si se detectan
Desde el MICOF os recomendamos avisar al colegio y a la familia más cercana lo antes posible para evitar que se extienda el contagio. Hay que evitar utilizar el secador y no se deben compartir peines, toallas, coleteros etc. Otra cosa a tener en cuenta es que se tienen que desinfectar la ropa y las sábanas, los peines y los cepillos, los juguetes, las alfombras y los tapizados (todo a 55, y lo que no se pueda, lavarlo en seco).
En caso de contagio debe iniciarse un tratamiento pediculicida siguiendo las instrucciones del producto. Estos se pueden aplicar como insecticidas (existen varias opciones) o con siliconas. Si el tratamiento es un insecticida, se deberá utilizar una loción pediculicida con el cabello seco, dejar actuar durante un tiempo, luego lavar la cabeza con un champú pediculicida y terminar aclarando con agua y vinagre y dejar que el pelo se seque al aire. Es aconsejable repetir 10 días y 20 días después.
Hay que recordar que los tratamientos contra estos parásitos sólo deben realizarse si se detectan piojos y/o liendres nunca como preventivos, ya que los piojos se pueden volver resistentes a los productos, algo que puede generar que se tarde más en erradicar el contagio.
Os dejamos una infografía con #consejosmicof para que la tengáis siempre presente