FUENTE: La Razón
Los investigadores utilizaron datos de 33.908 noruegos de todas las edades. Estos recogían con qué frecuencia hacían ejercicio físico los participantes y, además, si sufrían o no síntomas de ansiedad y depresión. Los datos proceden del estudio HUNT, realizado en Nord-Trondelag.
Al principio, todos los participantes estaban sanos. Para empezar, se les preguntó con qué frecuencia e intensidad hacían ejercicio. En las sesiones siguientes se les pedía que rellenaran un cuestionario con el que se miraba cada cuánto tiempo los participantes experimentaban síntomas de ansiedad o depresión. Se controló la influencia de variables de confusión, como factores socioeconómicos, IMC, enfermedades físicas y uso de medicamentos.
Los investigadores concluyeron que el ejercicio contribuye en gran medida a una buena salud mental. Además, se vio que el efecto era muy potente sobre la depresión. Los participantes que antes del estudio habían declarado que no hacían ejercicio tenían un 44% más de probabilidad de desarrollar depresión en comparación con quienes se ejercitaban entre una y dos horas por semana.
Suponiendo que se trate de una relación causa-consecuencia, se podían haber evitado el 12% de las depresiones haciendo ejercicio un mínimo de una hora a la semana, según los investigadores. La intensidad del ejercicio no era relevante. Sin embargo, en el caso de la ansiedad no se detectó el mismo efecto. Ni la frecuencia ni la intensidad del ejercicio repercutían.
¿Por qué funciona?
Los investigadores mencionan dos posibles razones: ante todo, es importante para tener una buena salud física, lo cual repercutiría favorablemente en la mental. También piensan que influye el aspecto social del ejercicio. Un estudio previo ya había sugerido que los factores psicosociales como la autoimagen y la interacción social contribuyen siempre al efecto positivo sobre el bienestar mental en este grupo de estudio.
¿Cuánto ejercicio se necesita? Entre dos y cuatro horas semanales parecen ser óptimas para una mejor salud mental, según un estudio previo.