FUENTE: Las Provincias
Beatriz Sevilla decidió dejar de teñirse el pelo el mismo día que cumplió los 58, hace justo un par de años. «Tampoco tenía demasiadas canas, pero estaba cansada de tener que ir a teñirme cada mes y medio. Dos amigas se dejaron su pelo blanco natural y me encantó el resultado, así que decidí hacerlo yo también», explica esta secretaria de dirección vallisoletana. Dejarse las canas está de moda, pero ¿por qué salen? ¿son hereditarias? ¿es verdad que si te arrancas una salen tres? El doctor David Saceda, dermatólogo del Grupo de Trigología de la Asociación de Española de Dermatología y Venerología (AEDV) aclara todas las dudas sobre las cabelleras plateadas.
No son blancas, son transparentes
En realidad, una cana es simplemente un pelo que ha perdido el color. No es que coja un tono blanco sino que va perdiendo el suyo propio, ya sea castaño, moreno o rubio. «La cana, de hecho, si la miramos a través del microscopio la veríamos transparente. Lo que pasa es que la propia estructura del pelo y la forma en la que inciden los rayos de luz hace que la apreciemos con un color blanco», explica el doctor Saceda. También ocurre que algunas canas cuando se estropean –agresiones del cloro de la piscina, el uso de champús que no son adecuados o la contaminación– se vuelven de un color más amarillento. «Por eso es aconsejable usar productos específicos para las canas», añade el especialista.
¿Y por qué el cabello pierde sucolor? Porque los melanocitos –que son las células que dan el color a la piel y también al pelo– van produciendo melanina hasta que llega un momento que con la edad se agotan. «Se sabe, además, que los melanocitos del pelo son mucho más sensibles que los de la piel, por eso no perdemos el color de nuestra piel pero sí el de nuestro cabello», explica Saceda. Se trata de un proceso que viene muy determinado por la genética, así que es muy habitual que si tu padre o tu madre han encanecido jóvenes, tú también los hagas. Pero existen otros factores que pueden tanto acelerar como frenar –que no impedir– el proceso y que «básicamente son los mismos que favorecen el envejecimiento. Llevar malos hábitos de vida como, por ejemplo, una dieta pobre en vitaminas y antioxidantes y rica en grasas saturadas. No practicar ejercicio físico, fumar, beber alcohol... Este tipo de actividades aumentan el estrés oxidativo de nuestro cuerpo, empeoran el envejecimiento de la piel y también el del pelo.
Genética, el factor determinante
En estos casos, la genética es un factor determinante, mucho más que cualquier otro aspecto. El que te cuides más o menos puede reducir o retrasar la aparición, «pero cuando se dan casos de gente muy joven con canas o mayor sin ellas es por pura genética».
– Hay gente que solo tiene un mechón de pelo blanco y el resto del cabello de su color.
–Los mechones blancos suelen ser de nacimiento y es porque en la zona de la piel en la que sale el pelo no tiene melanocitos. No tiene nada que ver con la cana tradicional, que aparece salpicada por toda la cabeza. Generalmente, las primeras suelen salir en la zona de las sienes –sobre todo en los chicos– y luego ya se van extendiendo por el resto del cuero cabelludo. Las canas en el cuerpo o en la barba siguen el mismo proceso que en la cabeza. No cambia nada. Eso sí, suelen aparecer antes en el pelo.
Mitos: no salen más porque las arranques
Cuántas veces hemos oído eso de que si te arrancas una cana te salen tres. Pues es mentira. «El que te arranques una cana no influye para nada en que te salgan más. Te saldrían igual, porque es una consecuencia del paso del tiempo», explica el tricólogo David Saceda.
¿Son más gruesas que el resto del cabello? Eso sí es verdad. «Con el envejecimiento están un poco más hinchadas que el resto del pelo e incluso parece como que destacan. Eso se debe a que se encrespan con más facilidad.
¿El estrés hace que salgan más canas? Este año se ha descubierto que hay una relación directa entre el estrés y las canas. Hasta ahora no se sabía con seguridad, pero se ha descubierto científicamente que sí, que el estrés influye en la aparición de las canas por dos mecanismos. «Por un mecanismo hormonal como, por ejemplo, el que genera la adrenalina que todos conocemos o el cortisol. Son hormonas que se elevan con el estrés e influyen negativamente sobre el pelo. Y también existe una relación directa con el sistema nervioso central. Hay fibras nerviosas que llegan justo a la base del pelo y sabemos que cuando estamos con un estrés continuado y constante puede influir en que el melanocito se estropee antes y aparezcan canas. De hecho, es muy típico que a raíz de un divorcio o la muerte de un familiar veas lo rápido que le han salido canas a esa persona en cuestión de dos o tres años. A Barack Obama le hicieron un seguimiento de cómo evolucionó el color de su pelo desde que asumió la presidencia hasta que finalizó su segundo mandato y la diferencia es muy notable. Hasta ahora no se sabía científicamente si esas canas aparecían solo porque había pasado el tiempo o por el estrés, pero ya no hay duda», concluye el especialista.
Canas en niños, motivo de consulta
En el caso de los más pequeños, la aparición de canas debe consultarse con un especialista. No se trata de un cabello blanco espontáneo sino de un número significativo de pelos blancos. «Aunque no deban preocuparnos en exceso sí que pueden ser el síntoma de alguna enfermedad, por lo que será bueno identificar la causa y poner los remedios oportunos», explican en la Asociación de Española de Dermatología y Venerología (AEDV). La presencia de canas puede esconder desde carencias de vitaminas a estrés o enfermedades del tiroides.
Champú violeta y mucha paciencia
Si está pensando en dejar de teñirse y lucir canas, una de las primeras cosas que debe hacer –además de armarse de paciencia– es encontrar a un buen colorista que le ayude con el largo periodo de transción hasta igualar todo el cabello. «A la gente le gusta la idea de dejarse las canas, incluidas las mujeres. El problema es que se tarda mucho tiempo en igualar todo el pelo y eso es lo que echa para atrás a mucha gente. Si se tuviese la melena blanca de un día para otro seguro que habría muchas más mujeres que no se volverían a teñir», admite el tricólogo David Saceda.
Dejarse el pelo blanco evita una cuantas visitas a la peluquería para teñirse, pero requiere de una serie de cuidados específicos. Porque lucir una bonita melena plateada también tiene sus trucos.
Para mantener un blanco luminoso, lo más importante es utilizar champús con pigmentos violetas. De esta forma, se neutraliza el tono amarillento que suelen adquirir las canas por la exposición al sol, al cloro de la piscina o por el uso de productos que no son los adecuados. La recomendación de los expertos es aplicar el producto en el área amarilla (suelen ser las puntas) porque si se aplica en la zona más blanca de la cana, puede quedar azulada.
Al haber perdido la melanina, el pelo gris es muy sensible al sol, por lo que se debe proteger durante todo el año con protectores capilares. Además, se reseca con mucha facilidad. La hidratación es otro de los cuidados fundamentales del pelo blanco.