FUENTE: Diario Médico
Se necesita una acción urgente para eliminar los obstáculos a la vacunación en las farmacias y poder actuar frente a la Covid-19. Esta es la conclusión del seminario Ampliando las puertas de vacunación a través de las farmacias, patrocinado por Sanofi Pasteur, en el marco del Congreso virtual de la FIP, que ha contado, entre otros ponentes, con Ann Lindstrand, coordinadora del Programa de Expansión de la Inmunización (EPI) de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Así, Lindstrand ha asegurado que "las farmacias comunitarias pueden ser un buen lugar para las vacunas Covid-19 en algunos contextos", pero ve tres obstáculos: "El primero, modificar la legislación en los países que sea necesario, algo que lleva tiempo y tenemos muy poco tiempo antes de que lleguen las vacunas Covid-19; el segundo, datos y sistemas de seguridad que necesitan estar conectados a los sistemas de vigilancia global, y el tercero, la confianza y la formación que se necesita para que esté en marcha", ha señalado Lindstrand.
La portavoz de la OMS ha añadido que están trabajando en un mecanismo de asignación justo y equitativo. "La idea es destinar el primer 20% de vacunas a trabajadores sanitarios, sociales, población mayor y de riesgo. Habrá también un 5% de dosis apartadas en una reserva para un contexto humanitario", ha detallado.
Catherine Duggan, CEO de FIP, ha sido la encargada de moderar la sesión y de analizar el valor socio-económico de las vacunas, tras una introducción de Dominique Jordan , presidente de la FIP.
Jordan se ha referido a la importancia de la vacunación -"si no, este Congreso de la FIP no sería virtual", ha dicho- y se ha referido a la encuesta sobre inmunización realizada hace un mes en 99 países. La conclusión principal de este estudio es que 36 países ya vacunan y 16 están en vías de hacerlo, ya que en muchos casos se hace necesario un cambio en la legislación.
Al final de la sesión, la CEO de FIP emitió un llamamiento a la acción para ampliar el papel de los farmacéuticos comunitarios contra la Covid-19 y otras futuras pandemias, reconociendo su potencial y favoreciendo su integración en los sistemas nacionales de salud. Para ello, la FIP reclama que el farmacéutico tenga acceso a los datos compartidos de los pacientes y su cartilla de vacunación, contribuyendo así a la sostenibilidad del sistema.
De hecho, Duggan ha aportado datos que muestran este coste-efectividad de la vacunación: sólo invirtiendo un dólar se logra un retorno de 151 dólares". Es más, se ha referido a una estimación de la OMS, según la cual vacunar de 10 enfermedades reportó beneficios económicos en 73 países de renta media y baja entre 2011 y 2020, aumen tando su productividad en 251,4 billones de dólares.
La lección de la prevención
Pese a la tragedia de la pandemia, una de sus lecciones es que "hay que invertir en prevención", según ha señalado el portugués Duarte Santos, presidente de la Agrupación Farmacéutica Europea (PGEU). En este sentido, Santos ha resaltado la valentía de los farmacéuticos durante esta crisis sanitaria y ha apelado a la Administración a tener en cuenta a la farmacia comunitaria. ¿Los motivos? Ayuda a descargar al presión asistencial en otros profesionales, está más próxima al ciudadano y "puede incentivarles, porque les conoce, para que se vacunen". Por ello, considera que hay que aprovechar el momento que brinda la pandemia y se ofrece, como presidente de la PGEU, a ayudar al país que lo necesite.
De hecho, Sónia Queirós, responsable de Asuntos Institucionales de la Asociación Portuguesa de Farmacias, se ha referido al éxito de la experiencia portuguesa en vacunación: "Parte del éxito ha sido la colaboración de farmacéuticos, médicos y enfermeros. Hay que hacer ver a la Administración que somos complementarios, no competencia" y ha subrayado que "es más fácil implantar servicios de vacunación en farmacia si el farmacéutico está integrado en sus sistema nacional de salud".
Bajas tasas de vacunación
A este respecto, Radu Costin Ganescu, vicepresidente del Foro Europeo de Pacientes en Rumanía, ha sostenido que en su país todavía hay mucho que hacer para lograr esta integración: "Sabemos que vacunar es coste-efectivo, pero no todos los Gobiernos lo ven. Rumanía es uno de los países que no tiene técnicos para asesorar en esta materia. Quizás ahora haya un cambio de paradigma, pero la educación es muy importante".
La educación y la lucha contra las fake news y los movimientos anti-vacunas que, según Queirós, son los culpables de que las tasas de vacunación en el mundo sigan siendo muy bajas. Sin ir más lejos, la OMS recomienda una cobertura del 75% en vacunación contra la gripe para personas mayores de 65 años, algo en lo que España está aún muy lejos, en un 54%.
Durante esta sesión de la FIP se ha hecho hincapié también en la necesidad de que esta cobertura llegue a los profesionales sanitarios, donde las tasas tampoco son altas. Así lo ha señalado Jane Barratt, secretaria General de la Federación Internacional sobre el Envejecimiento en Australia / Canadá: "Antes del Covid, las tasas ya eran bajas. Los Gobiernos deben reorientar sus estrategias a la prevención".
En este sentido, Duggan ha hecho un llamamiento a que la vacunación es un acto solidario, porque no protege sólo al individuo, sino al colectivo. Y lo ha ilustrado con una anécdota de una sobrina suya, de 6 años, que comentaba lo importante que era para ella vacunarse, para proteger a sus padres y abuelos, lo que supone, según Lindstrand, un punto a favor para las generaciones jóvenes, que también tienen mucho que enseñar.