FUENTE: DiarioFarma
Alex Soriano, jefe de Servicio de la Unidad de Enfermedades infecciosas del Hospital Clínic de Barcelona, y Carolina García Vidal, especialista sénior de misma Unidad, participaron en el I Congreso Nacional Covid-19, con ponencias en las que repasaron la investigación realizada en torno al uso de antivirales, como remdesivir, concluyendo que el uso de éstos en una fase precoz podría aumentar su efectividad en términos de evolución de la enfermedad y de mortalidad.
Soriano aludió a estudios como el Williamson en Nature, donde la aplicación de un antivírico en macacos en las primeras 12 horas tras la infección habría inducido "reducción carga viral y mejoría clínica"; el de Van Kampen en MedRxiv, sobre la mayor replicación vírica en los primeros 10-15 días, "que hace pensar que la efectividad del antiviral pueda ser mayor" en esa fase precoz; o al de Magleby en la Clinical Infectious Diseases, que asociaba la carga viral con la necesidad de cuidados intensivos y una mayor mortalidad. Todos le llevaron a la misma conclusión: "Cuanto mayor carga vírica, más efectivo será el antiviral".
Trasladado a las alternativas terapéuticas que se están usando en humanos para tratar la Covid-19, se refirió al famoso estudio liderado por Beigel y publicado en New England Journal of Medicine, que avalaría la celeridad en la mejoría de los pacientes con el uso de remdesivir en comparación con placebo, y otro liderado por Olender y publicado en Clinical Infectious Diseases que también reportaría beneficios en mortalidad en comparación con el estándar.
Además de en este tratamiento, el único autorizado actualmente en Europa, se habría visto mejoría clínica con la combinación de lopinavir/ritonabir, rivabirina e interferón b en otro estudio publicado en The Lancet, y en otro de Joyner publicado en MedRxiv con plasma convaleciente, que habría contribuido a reducir la mortalidad inferior.
Tras la revisión de éstos y otros estudios, Soriano concluye que con la aplicación del tratamiento antiviral en fases precoces, en las que se alcanza el pico de carga viral, "se podría demostrar que es ahí donde se consigue la mayor eficacia". Admite que, a día de hoy, "ninguno de los estudios se ha hecho en esta etapa", aunque se refirió a uno de Gilead con su fármaco, remdesivir, del que esperan "datos positivos". El tiene claro que se necesita "tratamiento antivírico con administración precoz para reducir ingresos hospitalarios y en UCI, así como la mortalidad".
García Vidal se centró en remdesivir, el que para ella es "el antiviral con el efecto más potente". Sobre el primer estudio que puso en cuestión su eficacia, publicado en The Lancet y liderado por Wang, recordó que la mediana en el plazo de aplicación del tratamiento en este estudio fue de 11 días tras la infección. En su opinión, en ese caso "el uso de remdesivir iba tarde". De hecho, recuerdan que "en un 20% de los participantes se vio que la carga viral era indetectable".
En cuanto al estudio del New England Journal of Medicine, al que aludió también Soriano, donde se vieron mejores tiempos de recuperación en el brazo de remdesivir, destaca que en ese caso el citado plazo cayó hasta los nueve días. En su opinión, lo ideal sería aplicar este fármaco "en los primeros siete-ocho días", especialmente si se trata de "pacientes con neumonía viral". Considera que esta hipótesis queda confirmada con el estudio de Olender en Clinical Inctious Diseases, donde se documentarían mejoras en recuperación, y también en mortalidad, beneficio que no quedaba claro en el estudio publicado en NEJM.
Más allá de la literatura, lo que han visto en su hospital es que los resultados han variado en los pacientes a los que se les ha administrado remdesivir. En una primera oleada, se dio una tasa de ingreso en UCI del 38% y un 3% de mortalidad, mientras que en esta segunda los porcentajes habrían caído al 11% y al 2%, respectivamente. Según la opinión de esta especialista, la razón de esa diferencia es que están utilizando el fármaco "de forma más precoz".