FUENTE: ABC

La vacuna de AstraZeneca contra el Covid-19 ha sido la tercera en llegar a España a principios de febrero tras recibir la autorización de la Comisión Europea. También ha sido la que más titulares ha acaparado en las últimas semanas por, entre otras cosas, producir efectos secundarios leves en mayor proporción que las otras dos vacunas o por la decisión de utilizarla solo en personas menores de 55 años.

La vacuna de AstraZeneca, como cualquier medicamento, puede producir efectos adversos, aunque no todas las personas los experimenten. Los más frecuentes, que pueden afectar a más de 1 de cada 10 personas, son sensibilidad, dolor, calor, picor o moratones en el sitio de la administración de la inyección; sentirse cansado (fatiga) o malestar general, escalofríos o sensación de fiebre, dolor de cabeza, sentirse enfermo (náuseas), dolor articular o dolor muscular, según puede leerse en su prospecto.

Para disminuir en la medida de lo posible estos síntomas, y a diferencia de otras vacunas, con la de AstraZeneca sí se puede tomar paracetamol antes de recibir el pinchazo y en las 24 horas siguientes. Así lo recoge la última actualización de la Estrategia de Vacunación del Ministerio de Sanidad: «Se observan reacciones locales y sistémicas leves frecuentes tras la vacunación. Se puede utilizar dosis de 1 gramo de paracetamol previa a la vacunación, seguida de 1 gramo cada 6 horas durante las primeras 24 horas, lo que reduce significativamente el dolor local, la febrícula, los escalofríos, las mialgias, la cefalea y el malestar postvacunal, sin influir en la respuesta inmune».

A diferencia de las otras dos vacunas, AstraZeneca sí dispone de datos del uso de paracetamol previo a la recepción de su fármaco. En el caso de las vacunas de ARN mensajero, el uso de medicación profiláctica antes de la recepción de las mismas, «a priori, no está indicada por la ausencia de información», señalan desde la Asociación Española de Vacunología. El mismo organismo advierte de que, en general, «no se deben tomar analgésicos/antitérmicos previos a la vacunación ya que para otras vacunas se ha observado una reducción de la respuesta inmune».

Las vacunas de Pfizer/BioNTech y Moderna utilizan una nueva tecnología basada en el ARN mensajero. La de AstraZeneca, sin embargo, es una vacuna de vector vírico que vehiculiza dentro de un virus inofensivo diferente al coronavirus la información genética necesaria para que el cuerpo humano produzca anticuerpos frente a la proteína S del SARS-CoV-2. Debe transportarse y almacenarse protegida de la luz en frigorífico a una temperatura entre 2ºC y 8ºC.

La pauta de vacunación en el fármaco de AstraZeneca es de dos dosis de 0,5 ml con una separación de entre 10 y 12 semanas.

Los ensayos clínicos de fase III realizados con esta vacuna, y presentados para su autorización en la Agencia Europea del Medicamento ( EMA), aportaban datos limitados en mayores de 55 años sobre su eficacia, lo que ha llevado a España a recomendar por el momento su utilización en personas entre los 18 y los 55 años de edad.