FUENTE: 20 Minutos
Las verrugas son pequeños crecimientos cutáneos, generalmente indoloros, que pueden aparecer en diferentes partes del cuerpo y que son causadas por el virus del papiloma humano (VPH).
Según la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV), existe cierta confusión con el término, que debe ser utilizado solamente para referirse a las infecciones cutáneo-mucosas producidas por el virus del papiloma humano.
Existen diferentes tipos de verrugas, entre las que se encuentran las verrugas vulgares, las verrugas filiformes, las verrugas planas, las verrugas plantares y las verrugas anogenitales, según la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG).
Normalmente, las verrugas comunes suelen ser inofensivas y desaparecen por sí solas con el paso del tiempo. Es por ello que una verruga solamente debe preocupar cuando produzcan dolor, interfieran con la función normal del individuo o por motivos estéticos importantes.
¿Producen dolor o picor las verrugas?
Lo cierto es que la mayoría de las verrugas son asintomáticas, es decir, no producen ni picor ni dolor de ningún tipo. Es por ello que hay que consultar a un médico cuando se note que la verruga ha crecido, cambiado de color o cuando empiecen a molestar o interferir en el día a día normal. Las únicas verrugas que suelen causar dolor son las verrugas plantares.
¿Se contagian las verrugas?
Efectivamente, las verrugas se contagian por contacto directo, necesitando una puerta de entrada que suelen ser pequeñas roturas en la piel o en las mucosas, aunque no todas las personas que entran en contacto con el virus desarrollan verrugas.
Se estima que las verrugas afectan entre el 7 y el 19% de la población general. Muchas de las verrugas aparecen en la edad pediátrica y suelen ser más frecuentes en las niñas que en los niños.
Es falso que las verrugas se transmitan a través de la sangre, ya que el virus causante de las verrugas no se encuentra en la sangre.
¿Las verrugas propias pueden hacer aparecer otras nuevas?
Lo cierto es que sí. El contacto directo con las propias verrugas puede hacer que aparezcan otras nuevas. Por ello, es importante no arrancarlas, ya que eso puede propagar el virus.
Además, es importante no morderse las uñas ni retirar la cutícula, ya que las verrugas aparecen con mayor frecuencia en la piel agrietada. También hay que evitar cepillar, frotar, cortar, afeitar o depilar la zona que tenga verrugas.
¿Se pueden eliminar las verrugas?
Entre un 60% y un 70% de las verrugas desaparece espontáneamente antes de 3 meses. En los niños, dos tercios de las verrugas que presentan se eliminan por sí solas en un periodo de dos años.
Sin embargo, si no desaparece, existen tratamientos diferentes para eliminarlas, aunque ninguno de ellos es 100% eficaz. Estos tratamientos pueden ser agentes queratolíticos, citotóxicos, inmunomoduladores, crioterapia, láser y la resección quirúrgica, entre otros.