FUENTE: La Razón

La hipertensión arterial afecta a más del 30% de la población adulta mundial. Consiste en una presión arterial alta. Si no se trata puede derivar en muchas afecciones médicas como enfermedades del corazón, accidentes cerebrovasculares, insuficiencia renal, problemas oculares y otros problemas de salud.

“La presión arterial es una medición de la fuerza ejercida contra las paredes de las arterias a medida que el corazón bombea sangre al cuerpo. Hablamos de hipertensión cuando la tensión arterial sistólica es mayor o igual a 140 mmHg y/o la tensión arterial diastólica mayor o igual a 90 mmHg. Estas cifras se basan en la evidencia de que el tratamiento para bajar la tensión por debajo de estos niveles es beneficioso. Esta definición es válida para todos los períodos de edad, excepto niños”, explica el doctor Rafael Florenciano, jefe del servicio de Cardiología de Quirónsalud Torrevieja.

Salvo en unos pocos casos, las causas son desconocidas, según asevera el especialista. De hecho, advierte de que existe un componente hereditario importante: “Una historia familiar de hipertensión ocurre en el 35-50% de los pacientes. La edad también es importante puesto que, a mayor edad, mayor probabilidad de tener hipertensión”.

¿Por qué es importante controlar nuestra presión arterial?

Como se ha mencionado anteriormente, el experto de Quirónsalud Torrevieja alerta de que una hipertensión arterial representa el “principal factor de riesgo” para padecer algunas enfermedades: cardiovasculares, especialmente enfermedad coronaria y enfermedad cerebrovascular; enfermedad renal crónica; la insuficiencia cardíaca y la demencia.

“La hipertensión no tratada puede dañar a varios órganos y sistemas del organismo. Entre los principales órganos que puede dañas son: el corazón, ojos y riñones. En cuanto a los sistemas, el más afectado es el sistema arterial; el cual, indirectamente, provoca patologías en otros órganos: infarto de miocardio, ictus o claudicación intermitente en las piernas”, agrega Florenciano.

Por sí sola, alerta de que supone un aumento del riesgo de padecer los eventos cardiovasculares anteriormente mencionados. Además, mantiene que parece que hay una relación estrecha entre la hipertensión, la fibrilación auricular, el deterioro cognitivo y la demencia. “Pero debemos tener en cuenta que, con frecuencia, la hipertensión se asocia a dislipemia y diabetes, aumentado, de forma importante, el riesgo cardiovascular”, insiste el cardiólogo.

Es más, el experto de Quirónsalud Torrevieja sostiene que la hipertensión también puede estar relacionada con algunos problemas hormonales como: feocromocitoma, hiperaldosteronismo e hipertirodismo; y añade que la apnea del sueño también se relaciona con hipertensión.

Síntomas de la hipertensión arterial

Ante este escenario, el doctor Rafael Florenciano considera que la medición precisa de la presión arterial es “fundamental” para el diagnóstico y el tratamiento adecuado de la misma. “Podemos decir que algunos pacientes se quejan de dolores de cabeza y nunca cuando tienen cifras elevadas de tensión”, añade.

A su juicio, es importante conocer los síntomas de las enfermedades que se relacionan con la hipertensión, como puede ser: dolor torácico, dificultad en la respiración o sensación de ahogo, edemas (hinchazón causada por la acumulación de líquido en los tejidos del cuerpo), sangre en la orina, dolor en piernas con el ejercicio, entre otros. “Investigándolos indirectamente se puede descubrir que el paciente es hipertenso”, apostilla el jefe del servicio de Cardiología de Quirónsalud Torrevieja.

Ante la sospecha, recomienda siempre acudir a la consulta del especialista, y a pesar de la pandemia, puesto que los centros sanitarios son hoy seguros frente al contagio de COVID-19 al haber diseñado circuitos y espacios de atención libres del virus.

Quirónsalud Torrevieja cuenta además con la certificación ‘Applus+ Protocolo Seguro frente a la COVID-19’, que acredita el cumplimiento en sus instalaciones de los estándares más exigentes de desinfección en esta pandemia.

Tratamiento

Sobre el tratamiento de hipertensión, Florenciano comenta que sólo se cura en los pocos casos en los que es debida a algún problema hormonal a los que nos referimos previamente o en el caso de la apnea del sueño. Concretamente, cita que se basa en 3 pilares: los cambios en el estilo de vida, la dieta y los medicamentos.

“Los cambios en el estilo de vida hacen referencia a la realización de ejercicio moderado de forma regular, control del peso, moderación del consumo de alcohol y abandono del tabaco. En cuanto a la dieta, el factor principal es la reducción de la ingesta de sal, limitando el consumo a menos de 5 gramos al día. La medicación es el último pilar, siendo el médico el que decidirá cuál es el mejor tratamiento que se adapta a cada caso”, detalla el cardiólogo de Quirónsalud.

Eso sí, subraya que la aproximación al paciente hipertenso debe ser multidisciplinar, ya que se ha visto que el daño que puede producir es multiorgánico. “En el tratamiento de la hipertensión deben intervenir: internista, cardiólogo, oftalmólogo y nefrólogo. En los centros de Quirónsalud Torrevieja, Alicante, Murcia y valencia contamos con un equipo de médicos cardiólogos especializados en el estudio y prevención de casos de hipertensión”, sentencia el doctor Rafael Florenciano, jefe del servicio de Cardiología de Quirónsalud Torrevieja.