Desde el inicio de la pandemia se ha querido identificar a aquellas personas que podían estar infectadas por el virus SARS-COV-2 con el fin de aislarlos y permanecer a salvo de este. ¿Cómo? A través de los famosos test de autodiagnóstico de la COVID-19 que han servido de apoyo a las pruebas PCR. Hasta ahora ha sido necesaria la correspondiente prescripción médica, pero ya ha dejado de ser un requisito. Y es que la modificación del Real Decreto 1662/2000, de 29 de septiembre, sobre productos sanitarios para diagnóstico «in vitro», y su publicación en el Boletín Oficial del Estado, permite la dispensación exclusiva en las farmacias comunitarias de las pruebas de autodiagnóstico de la COVID-19, sin necesidad de aportar la correspondiente prescripción médica.
¿Por qué los profesionales sanitarios han sugerido este cambio? ¿Qué ventajas proporciona? Desde el sector sanitario en todo momento se ha pretendido reducir la presión asistencial del Sistema Nacional de Salud y este cambio ayuda a ello, ya que se pretende ampliar la capacidad diagnóstica del virus, incluso en asintomáticos, lo que resulta especialmente importante en esta quinta ola para la detección de casos de covid-19; más si se tiene en cuenta la extensa red de farmacias comunitarias en todo el territorio valenciano.
Aunque ya llevamos meses conviviendo con los test de autodiagnóstico (antígenos y anticuerpos), la información es cambiante y se amolda a los nuevos descubrimientos, por lo que siguen surgiendo nuevas dudas y preguntas. Con frecuencia, se acude a la farmacia para resolverlas, por ello desde el MICOF os resolvemos las preguntas más frecuentes:
1. ¿Cómo identificar si el test es falso?
Debido a que son de venta exclusiva en farmacias comunitarias, cualquier producto dispensado en estos establecimientos es completamente legal. Para los curiosos que quieren obtener más información, destacar que estas pruebas pueden o no tener un código nacional (CN) asignado -dependerá de si el fabricante lo ha solicitado-; sin embargo, sí que deberán tener siempre asignado CE + 4 dígitos del Organismo Notificado que lo autoriza.
2. ¿Se puede obtener un certificado COVID-19 tras la realización de un autotest?
No. El certificado COVID-19 solamente se puede emitir por laboratorios clínicos en los que se realicen pruebas de PCR o antígenos.
3. ¿Cómo debo tomar la muestra para los test de autodiagnóstico?
Existen dos tipos de test de autodiagnóstico: los de antígenos, que detectan la presencia de antígenos del SARS-COV-2 y, en caso de resultado positivo, es necesaria una prueba confirmatoria cuyas muestras son con fluidos orales y nasal; y las pruebas que detectan los anticuerpos, pero no necesariamente la infección en curso por SARS-COV-2, cuya muestra es de sangre capilar. En el caso de los test de anticuerpos se distinguen dos grupos: los que evalúan la respuesta inmune generada por la vacuna (IgG/IgM frente a la proteína S) y los que no (IgG/IgM frente a otras proteínas).
A continuación, os dejamos unos #consejosMICOF para tomar correctamente la muestra según el tipo:
a. Test antígenos: fluido oral
Recuerda: deberás hacértelo tú mismo y la farmacia es el único sitio donde los puedes obtener.
b. Test antígenos: nasal
c. Test anticuerpos: punción capilar
4. ¿Son fiables?
La Unión Europea recomienda utilizar los test de antígenos con un mínimo de especificidad y sensibilidad. En concreto, un 97% de especificidad y sensibilidad del 90%, mientras que para los de anticuerpos es necesario un mínimo de un 98% de especificidad y un 90% de sensibilidad. Pero ¿qué significan estos términos? La sensibilidad es la probabilidad de clasificar correctamente a un individuo enfermo, en otras palabras, la probabilidad de que una persona enferma obtenga un resultado positivo. Por otro lado, la especificidad es la probabilidad de clasificar a un individuo sano, es decir, la probabilidad de que una persona sana obtenga un resultado negativo.
Cabe indicar que estas pruebas son evaluadas por organismos independientes designados por las autoridades en la que verifican el diseño e información proporcionada por el fabricante y determina si son adecuados y cumplen los requisitos necesarios.
En definitiva, la dispensación de los test de autodiagnóstico de la Covid-19 sin prescripción médica los hace accesibles para los ciudadanos y pueden suponer un desahogo para el SNS. Además, el farmacéutico facilitará el uso de estas pruebas que, tras una explicación sencilla de cómo utilizarlo y la lectura de los resultados, los pacientes deberán realizar en sus hogares. Todo ello con la esperanza que cuando se lleve a la práctica, se actúe de manera responsable, en la que los ciudadanos en caso de positivo lo trasladen al profesional sanitario y se confirmen los resultados, siendo imprescindible no relajar las medidas de seguridad.