Fuente: 20 Minutos
Se conoce como vaginitis a la inflamación de la vagina a causa de un cambio en el equilibrio normal de las bacterias que puede provocar dolor, picazón y sangrado.
Existen varios tipos de vaginitis, siendo los más comunes la vaginosis bacteriana, que se produce por un cambio en las bacterias de la vagina y que puede provocar un crecimiento excesivo de otros órganos, la candidosis vaginal, causada por el hongo Candida albicans, y la tricomoniasis, que se transmite de manera sexual y que está provocada por un parásito.
Los síntomas habituales suelen ser el cambio en el color y el olor del flujo vaginal, dolor al orinar o al mantener relaciones sexuales, picazón o escozor, irritación vaginal o sangrado leve.
Cómo prevenir la vaginitis
La higiene personal es fundamental para evitar esta infección aunque existen otros métodos de prevención como evitar bañeras y jacuzzis, limpiarte siempre de adelante hacia atrás al ir al baño para evitar transmitir bacteria fecales, y evitar todo aquello que nos irrite como desodorantes, tampones, compresas, jabones perfumados o lavados vaginales.
Usar ropa interior de algodón y preservativos de látex para mantener relaciones sexuales son otras maneras de prevenir padecer vaginitis.
Existen factores de riesgo que pueden influir a la hora de desarrollar vaginismo, como cambios hormonales, la actividad sexual, consumir antibióticos o esteroides, diabetes, ropa interior húmeda y ajustada, llevar un DIU o productos de higiene como baños de burbujas, aerosoles o desodorantes.