Fuente: Valencia Plaza
Un equipo multidisciplinar publica un estudio que demuestra cómo un suplemento diseñado con sustancias nutracéuticas (nutrientes con beneficios para la salud) puede ser útil para proteger la retina, ralentizar la disfunción visual y reducir el estrés oxidativo en pacientes con retinosis pigmentaria.
Esta enfermedad rara y degenerativa de la retina tiene una elevada heterogeneidad clínica y genética con más de 120 genes implicados actualmente, explica el Centro de Investigación Príncipe Felipe.
Regina Rodrigo y Lorena Olivares, investigadoras del Laboratorio de Fisiopatología y Terapias de Enfermedades de la Visión del CIPF, junto a David Salom, jefe del servicio de Oftalmología, y Emilio González, del servicio de Neurociencias del Hospital de Manises (Valencia), llevan años trabajando en la búsqueda de terapias neuroprotectoras que retrasen la degeneración de la retina en retinosis pigmentaria (RP).
En el estudio, con resultados publicados esta semana, participaron 31 pacientes con RP que recibieron diariamente durante dos años una mezcla de ácido fólico, vitamina B6, vitamina A, zinc, cobre y selenio entre otros suplementos nutricionales, mientras al resto de pacientes se les administró placebo.
"Aunque es necesario realizar más estudios con un mayor número de participantes, parece que este complejo nutricional podría ser beneficioso para retrasar el proceso degenerativo que sufren las retinas de los pacientes afectados por esta enfermedad rara. Esta neuroprotección sería importante, ya que solo existe un tratamiento para uno de los genes descritos en esta enfermedad", expone Regina Rodrigo.
Durante el proyecto se evaluó la función visual de los pacientes al inicio del estudio, así como dos años después, y se analizaron varios marcadores relacionados con el estado 'redox' (antioxidante/oxidante) y la inflamación. También se llevaron a cabo estudios dietéticos y nutricionales realizados por nutricionistas del Hospital La Fe de València en colaboración con el equipo del CIPF.
Al cabo de dos años, los pacientes que recibieron este complejo nutracéutico presentaron mejores respuestas eléctricas de la retina que los que recibieron placebo; es decir, el empeoramiento de la función retiniana fue más lento en los que habían tomado el complejo. Además, mejoraron algunos parámetros relacionados con el estado 'redox' ocular en comparación con los que tomaron placebo.
Los resultados de este estudio sugieren que estos suplementos a largo plazo podrían ralentizar la discapacidad visual y mejorar el estrés oxidativo ocular. Ahora, el siguiente paso es llevar a cabo estudios con más participantes, con otros marcadores 'redox' y un período de seguimiento más prolongado para confirmar estos hallazgos.
En la investigación participó el grupo de Biomedicina Molecular, Celular y Genómica del IIS La Fe, dirigido por José María Millán, mientras José Miguel Soriano, del Instituto de Ciencias de los Materiales de la Universitat de València (UV), diseñó el nuevo complejo nutricional. También participaron David Hervás, del servicio de Estadística Aplicada de la Politècnica de València (UPV), y Juan Francisco Merino, jefe de Endocrinología y Nutrición de la Fe. El servicio de Farmacia de este hospital fabricó el complejo.
Este proyecto contó con el apoyo del Instituto de Salud Carlos III, el Centro de Investigación Biomédica en Red de Enfermedades Raras, los fondos europeos FEDER, la asociación Retina CV y el programa Valencia-Biomed IIS La Fe-UV.