El vicepresidente del MICOF, Juventino Jiménez, asistió ayer a una Charla coloquio sobre la ética en la práctica profesional organizada por Ethos Living Lab de la Universitat de València (UV) y que estuvo centrada en la ética dentro de la profesión farmacéutica. Durante la charla, que estuvo moderada y conducida por el Catedrático de Filosofía Moral de la UV, Agustín Domingo, Juventino Jiménez habló de los objetivos, fines y funciones del MICOF.
Ante la pregunta de cómo consideraba que se pueden reforzar la ética de la sociedad civil y las organizaciones donde los profesionales prestan servicios, el vicepresidente del Colegio respondió firmemente que mediante la formación y la información.
En ese sentido, Jiménez también destacó la necesidad de la implantación e implementación de los Comités de Ética, a través de los principios de Responsabilidad Social Corporativa (RSC) de las organizaciones, a fin de promover los valores responsables y aprobar el código deontológico de cada una de ellas tanto a nivel interno como externo. “Creo que en estos Comités deben encontrarse profesionales con experiencia dentro del campo concreto de actuación, pero también personas externas con formación multidisciplinar que puedan aportar sus principios, valores y experiencia”, señaló.
Asimismo, también explicó la organización de la dimensión ética y deontológica entre los profesionales farmacéuticos por parte del Colegio, para lo que la entidad colegial dispone de una Comisión Deontológica y un Servicio de Inspección y Deontología. Al respecto, el vicepresidente del MICOF indicó que ante cualquier queja “se fomenta el diálogo y la conciliación, ofreciendo la mediación para dirimir los posibles conflictos que pudiera haber” y manifestó que “afortunadamente, son escasos los expedientes disciplinarios que hay que tramitar ya que somos unos profesionales sanitarios muy cumplidores”, concluyó.
Durante la charla, Jiménez recordó a instancias de su interlocutor los distintos códigos o herramientas de deontología profesional para resolver conflictos de intereses, tanto en las organizaciones colegiales como en las sociedades científicas farmacéuticas.
Finalmente, el vicepresidente del MICOF mostró su preocupación por las personas que, valiéndose del fácil acceso y en ocasiones del anonimato en el uso de redes sociales, internet y otras vías digitales y siendo ajenas a las profesiones sanitarias, están aconsejando sobre determinados productos y medidas a sus seguidores o incluso están vendiendo desde países extranjeros fármacos que en España necesitan de prescripción médica sin ningún tipo de garantía porque en esos territorios disponen de una legislación mucho más laxa que la española en cuanto a dispensación de medicamentos.