Fuente: El Global
Superar una inspección de Sanidad en la oficina de farmacia es un objetivo más que debe tener el titular en torno a la correcta gestión de la misma. “Gestionar la farmacia correctamente y cumplir con todo lo que va marcando la normativa es sencillo si se tiene claros los puntos sobre los que debe prestar más atención”, aclaró Mireia de María, abogada del departamento Jurídico de Asefarma durante una sesión informativa celebrada en el Espacio Asefarma.
De acuerdo con el Plan de inspección para oficinas de farmacia aprobado por la dirección General de Inspección y Ordenación Sanitaria de la Comunidad de Madrid el pasado 9 de febrero, se establece que el fin general debe ser “garantizar la eficiencia, calidad y seguridad de la asistencia sanitaria que se presta a los ciudadanos, en todos los centros y servicios sanitarios, tanto públicos como privados, en los establecimientos sanitarios de óptica y en los vehículos de transporte sanitario, asegurando el cumplimiento de la normativa vigente en lo referente a planta física, personal y medios, así como las normas mínimas para su correcto funcionamiento”.
Por ello, el departamento Jurídico de Asefarma insiste en el que farmacéutico realice “autoinspecciones en su oficina de farmacia”. “Se trata de la mejor manera de tener todo correctamente y a punto para poder recibir cualquier visita del inspector de Sanidad sabiendo que su gestión está siendo la adecuada“, detalló De María.
De hecho, la abogada recuerda que el farmacéutico debe colaborar en todo lo que solicite el inspector de Sanidad, ya que obstruir la labor inspectora “constituye una infracción de tipo grave que puede suponer una multa de entre 15.000 y 30.000 euros”.
Check list como herramienta básica
Desde Asefarma, aconsejan el “check list” como la mejor manera de saber si se tiene la farmacia preparada para superar con éxito una inspección. En esa lista, se pondrá “todo aquello que debemos disponer en la farmacia y vigilar detenidamente y repasarla periódicamente punto a punto”.
“Siempre es mejor prevenir que tener que pagar posteriormente una sanción. Y, sobre todo, resulta necesario ya no solo para tener todo en regla sino para no incurrir en ninguna falta que pueda poner en peligro la salud del paciente“, apuntó De María. Así, mencionó aspectos a tener en cuenta, como el control de la temperatura o humedad, el periodo de la conservación de las recetas de los medicamentos, el control de las caducidades o la custodia obligatoria de estupefacientes.
Asimismo, Mireia de María, también insistió en que “jamás se debe dispensar un medicamento si no hay receta o si la receta está incompleta o contiene algún elemento que le genere dudas“. Ante esta situación el farmacéutico debería consultar con el médico prescriptor y en caso de que no sea posible o le indique se trata de un error “debe bloquear inmediatamente la dispensación”.
También, añadió, es muy importante “contar con un protocolo de dispensación errónea en el que se pueda recoger la incidencia concreta que pueda haber ocurrido, la fecha en la que se ha producido y, por supuesto, la resolución de la misma”.
Otras cuestiones importantes
Otro aspecto a tener en cuenta es contar con la documentación obligatoria: la Farmacopea española con sus suplementos, el libro de estupefacientes, el libro recetario, el Formulario Nacional o el catálogo de medicamentos. “Documentos que deben contar con sus versiones actualizadas y que se pueden tener disponibles de forma online”, detalló la abogada.
Además, Mireia de María quiso remarcar durante la sesión informativa algunos puntos incluidos en el nuevo Plan de Inspección para oficinas de Farmacia de la Comunidad de Madrid: la evaluación del funcionamiento y de la calidad del servicio prestado a los ciudadanos por las Oficinas de Farmacia o control y seguimiento de la prescripción y utilización de medicamentos dispensados a través de receta médica oficial del SNS.
También se hizo hincapié en la inminente aprobación de la nueva Ley de Ordenación y Atención Farmacéutica de la Comunidad Madrid. Entre las inquietudes más destacadas de los asistentes, se pusieron de manifiesto las relativas a la libertad de horarios y las dudas que genera la atención farmacéutica a domicilio.