FUENTE: Las Provincias.
La presión asistencial que en las últimas semanas ha acompañado a las Urgencias hospitalarias ha afectado a varios centros sanitarios, entre ellos el Hospital de Manises, que se ha visto saturado hasta el punto de dejar durante 48 horas a pacientes a la espera de cama. El sindicato de enfermería Satse denunció ayer esta situación señalando que una veintena de enfermos se vieron obligados entre el miércoles y el jueves a esperar «un día y en algún caso dos» dos para disponer de una plaza de hospitalización. La formación sindical insistió ayer en que las instalaciones hospitalarias de Manises se encuentran «al 100 por cien de su ocupación» y en los últimos días «dado que la situación no tenía visos de mejorar», la dirección del centro decidió «vaciar la Unidad de Reanimación Postoperatoria (URPA) para albergar en ella a ocho de los pacientes que se encontraban en los pasillos de Urgencias». Esta decisión comportó que previamente fuera necesario «trasladar a los pacientes de la URPA a la Unidad de Corta Estancia UCSI», según la denuncia del sindicato. También destacaron que la mayor parte de los pacientes atendidos responden a casos de patologías crónicas que se han agravado por procesos respiratorios y gripe.
Desde la dirección del centro sanitario reconocieron que en las últimas semanas se ha registrado una elevada afluencia de enfermos a la unidad de Urgencias al pasar «de 260 a un pico de 320 pacientes». Respecto a la utilización de la URPA para ingresar a los pacientes que se encontraban a la espera de cama destacaron que el jueves por la noche ante un nuevo pico de pacientes y dado que por la noche no hay actividad quirúrgica, los responsables del centro sanitario decidieron que los enfermos que esperaban plaza para ingreso se instalarán en la URPA.
A ello añadieron que a última hora de la mañana de ayer los pacientes que se encontraban pendientes de cama «ya habían ido pasando a las habitaciones» y la situación se había normalizado.
Dos camas
El sindicato de enfermería señaló también que desde la semana pasada, «cuando ocurrió una situación de saturación similar a la actual que se prolongó durante unas horas, se ha tenido que instalar una segunda cama en muchas de las habitaciones individuales». Esta circunstancia llevó a los representantes del personal de enfermería a destacar que de esa manera se produce un «grave problema de confortabilidad para los enfermos y los familiares que los acompañan». Según los datos que facilita el sindicato este hospital comarcal cuenta con 221 habitaciones individuales y «sólo en la primera planta de hospitalización, estos últimos días se han tenido que doblar 18 habitaciones».
Desde el centro sanitario recordaron que las habitaciones en las que se instalan dos camas están habilitadas para ello, «son más grandes», y además disponen de todos los medios para poder acoger a dos pacientes.
Las circunstancias de las últimas semanas han llevado según Satse a este hospital a afrontar «un cien por cien de ocupación constantemente» y las dos situaciones de «saturación» a las que hacen referencia han motivado que el sindicato reclame un «refuerzo de la plantillas de enfermeras en todo el hospital para sobrellevar este repunte de actividad asistencial, como mínimo, hasta que se solucione el problema y de cara a las próximas semanas».