El dolor de espalda se ha convertido ya en un problema crónico en España. Los factores que influyen son muchos y es una de las principales causas de baja laboral en nuestro país. Afecta a nada menos que a 8 de cada 10 ciudadanos, según las cifras que maneja la Sociedad Española de Reumatología (SER). En la mayoría de los casos, las molestias se acentúan con el paso de los años y pueden tener un impacto muy significativo en la calidad de vida de las personas.

Esta condición puede ser difícil de tratar en función de sus causas. Afortunadamente, la investigación avanza y encuentra soluciones cada vez más efectivas para abordarlas. En esta línea, un grupo de científicos ha descubierto un nuevo tratamiento mínimamente invasivo que ha probado su capacidad de aliviar los dolores de espalda crónicos asociados a la enfermedad degenerativa del disco lumbar.

Esta afección, que provoca dolores en lumbares y espalda, se produce principalmente por el desgaste de los discos intervertebrales con el paso del tiempo. En ocasiones puede darse a partir de un traumatismo de baja intensidad. Se trata de un mal bastante común: se estima que al menos un 30% de las personas entre 30 y 50 años de edad tendrán algún grado de degeneración a lo largo de su vida.

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