La espalda de casi todos tiene un enemigo común; en realidad dos: las largas jornadas sedentarias a las que nos someten nuestras obligaciones laborales y las posturas poco saludables que adoptamos frente a las pantallas de ordenador que suelen protagonizar nuestro día a día. Horas y horas sentados pueden provocar molestias y contracturas, las más frecuentes lumbares y cervicales. Y en ocasiones terminan siendo un problema: hoy día se ha convertido en la principal causa de baja laboral.
Es, en cualquier caso, una de "las consultas más comunes en los centros médicos", afirma Enrique Ornilla, doctor del departamento de Reumatología de la Clínica Universidad de Navarra. Según los datos que maneja la Sociedad Española de Reumatología, 8 de cada 10 españoles sufren dolor de espalda, una cifra que responde a que «pasamos mucho tiempo en una postura poco adecuada y forzamos los músculos y las articulaciones», argumenta Manuel Rozalén, fisioterapeuta y director de la Clínica Rozalén.
En general, nuestro día a día es poco activo y esa falta de ejercicio físico de forma regular tampoco ayuda porque, entre otras cosas, favorece el exceso de peso corporal. Además, "mientras estamos sentados en una silla los glúteos no trabajan y los condenamos a recibir menos oxígeno, se atrofian y sufren contracturas que a su vez producen dolores lumbares", comenta Alexander Pérez, CEO fundador de Wonder Medical, especialistas en musculación. "Está demostrado que una columna vertebral estable, protegida por una masa muscular potente, reduce invariablemente este tipo de dolores", asegura.
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