Fuente: Valencia Plaza.

VALÈNCIA (VP). Entrevista a Jaime Giner, presidente del Muy Ilustre Colegio Oficial de Farmacéuticos de Valencia (MICOF), en la que destaca que la colaboración de la institución con la administración pública permite "mejorar el sistema sanitario y solucionar problemas a la ciudadanía”.

Pregunta: ¿En qué situación se encuentra la profesión farmacéutica ahora que la pandemia de la COVID-19 parece que haya quedado atrás?

Respuesta: Hemos recuperado la tranquilidad tras atravesar tiempos difíciles. Poco a poco vamos normalizando la situación, aunque la enfermedad no ha desaparecido. Nos encontramos con ganas de trabajar y muy ilusionados. Si algo ha quedado claro, a raíz de la pandemia, es la necesidad de nuestra colaboración y así lo ha entendido la administración.

Ha supuesto un punto de inflexión, por ejemplo, permitió avanzar en la colaboración con la administración mediante la entrega en proximidad de medicamentos hospitalarios o a través de programas de detección de reacciones adversas. Con Salud Pública, actualmente, estamos potenciando distintas formaciones desde el MICOF para asuntos como las olas de calor, el agua de piscinas o vectores biológicos como mosquitos, chinches o garrapatas, que es un problema que está creciendo y se debe controlar. También avanzamos en otros temas que habían quedado un poco opacados por la pandemia, como los cribados de cáncer de colon o de cérvix, en los que se restablece la colaboración.

La perspectiva de la profesión farmacéutica es buena, tanto en la comunitaria como la hospitalaria vamos a mantener una buena colaboración con Conselleria de Sanitat por el bien del paciente. Avanzar hacia la integración de la farmacia comunitaria en el Sistema Nacional de Salud va a permitir solucionar muchos problemas de la ciudadanía.

P: Recientemente se han celebrado las I Jornadas del Levante Farmacéutico y en el horizonte ya se vislumbra el Congreso Nacional Farmacéutico que tendrá lugar en Valencia. ¿Qué objetivos persiguen este tipo de eventos?

R: Estas jornadas fueron un verdadero éxito, con casi 500 asistentes. Como conclusión entendimos la necesidad de poner sobre la mesa todo lo que ha traído la pandemia: los trabajos realizados, la colaboración con la administración, la Cátedra DeCo sobre deterioro cognitivo con la universidad Cardenal Herrera CEU o la colaboración con la UV sobre el uso racional del medicamento y atención farmacéutica, así como otros proyectos. Todo se ha expuesto y se ha debatido para seguir orientándolo de cara al futuro.

También se ha visualizado la situación de la farmacia rural que es importante porque ningún ciudadano debe estar privado de una atención farmacéutica adecuada.  Este tema lo estamos trabajando desde el MICOF con la Diputación de Valencia y vamos a luchar por ello.

Todas estas cuestiones abordadas en dichas jornadas van a ser un anticipo del 23 Congreso Nacional Farmacéutico, que acogemos en Valencia del 7 al 9 de febrero de 2024. Haber mostrado todo lo que podemos hacer en la Comunidad Valenciana es también una motivación para el  Consejo General de Colegios Farmacéuticos de cara a venir a Valencia, porque la Comunitat demuestra ser un referente a nivel nacional y merece estar en primera línea.

P: Entre todas las líneas de actuación llevadas a cabo por el MICOF dentro de cada vocalía, ¿cuáles destacaría?

R: Hay proyectos importantes a nivel de Salud Pública, como los ya citados que afectan al cáncer de cérvix y de colon, pero también otras colaboraciones como las referidas a pigmentación de la piel, entrega en proximidad o el programa a nivel autonómico de seguimiento del paciente crónico en el ámbito rural.

También a nivel de ciudad queremos ayudar a atender a pacientes que están solos y necesitan apoyo, ya que esta situación no solo se da en el medio rural. Son pacientes que necesitan un apoyo y es difícil detectarlo, pero puede hacerse desde las farmacias. Tanto Policía como Guardia Civil nos han pedido colaboración con este asunto, que es muy serio. Se trata de soledad no deseada que genera problemas desconocidos como la desnutrición, no por falta de recursos sino por propio abandono, circunstancia que se da más en mujeres que en hombres por un factor social. Estas personas pasan a menudo de cocinar para la familia a consumir procesados industriales cuando se quedan solas, lo que genera desequilibrios que se deben atender

También es muy importante el programa “Xarxa Pacients”, que empezó antes de la pandemia, pero que se vio afectado por esta. Se basa en formar a pacientes para que formen a su vez a sus compañeros. Son personas que conocen la enfermedad en primera persona, por lo que, de igual a igual, ofrecen formación a otros pacientes, con lo que la percepción del que escucha es distinta, ya que lo oyen es de una persona que vive el mismo problema. Empezamos con enfermos de diabetes y hemos llegado a cinco patologías como enfermedad renal o fibromialgia. El objetivo es crear una red de pacientes y estamos satisfechos porque han pasado ya más de 600 pacientes por la escuela. Nuestro papel es ayudarles, porque las asociaciones de pacientes son los protagonistas y nuestra labor asesorarles y ofrecerles todos los recursos técnicos de los que disponemos.

P: Otro de los principales objetivos que desde la institución colegial se ha remarcado de forma constante es el de buscar la unión entre las diferentes modalidades profesionales farmacéuticas, ¿se está consiguiendo?

R: En este sentido vamos poco a poco alcanzando retos. La colaboración en entrega en proximidad ha propiciado un acercamiento entre farmacia hospitalaria, farmacéuticos de distribución que gestionan el envío desde el hospital y la farmacia comunitaria que los recibe. Se ha creado un punto de unión que va a crecer en muchos aspectos. Hemos colaborado también en formaciones con Salud Pública y con farmacéuticos de atención primaria y nuestra intención es iniciar más proyectos.

P: Desde el Colegio también estáis apostando firmemente por la farmacia rural. ¿Por qué?

R: Como ya he comentado antes, ningún ciudadano debe estar privado de una atención farmacéutica adecuada. Esta voluntad de ayudar la hemos desarrollado durante varios años a través del Programa con la Diputación de Valencia. En 2022, durante la segunda edición de este programa, instalamos carpas en 13 municipios con farmacéuticos realizando pruebas como medición de la tensión, glucemia y otros parámetros para detectar posibles patologías. Cuando se descubren valores anormales se deriva al médico de familia para que pueda diagnosticar. Hemos redirigido así a la atención primaria un buen número de pacientes. Por este programa el pasado mes de junio se nos dio un premio como mejor iniciativa a nivel nacional en responsabilidad social corporativa y de alineamiento con los ODS, pero lo más importante es que los pacientes estaban muy satisfechos, porque veían preocupación por ellos.

P: El Colegio continúa trabajando en la implantación de los llamados Servicios Profesionales Farmacéuticos Asistenciales (SPFA), ¿en qué beneficia esto a la población?

R: Cada programa ofrece beneficios muy concretos. Podríamos comenzar destacando el de indicación farmacéutica. Vamos a celebrar la clausura del programa INDICA+PRO que atiende síntomas menores desde las farmacias de forma protocolizada y con consenso de sociedades científicas médicas. Esto da unos resultados importantes para ayudar a la atención primaria, facilitando el trabajo de los médicos, nunca sustituyéndolo. Supone un ahorro en el sistema público de salud porque ayuda a gestionar los casos.