Los términos temperatura y calor se usan a veces indistintamente en el lenguaje cotidiano y, sin embargo, no designan el mismo concepto en el entorno de las Física. Es más, a veces se le llama calor a lo que en realidad es temperatura, o viceversa.
Modelo cinético de la materia y temperatura
Comencemos por el concepto de temperatura. La temperatura es una medida de la energía cinética promedio de las partículas que componen una sustancia. En otras palabras, está relacionada con la rapidez con la que las partículas se mueven en un sistema dado. El modelo cinético de la materia nos proporciona una base sólida para comprender este concepto.
En este modelo, se representa a la materia como un conjunto de partículas (átomos o moléculas) en constante movimiento. Cuanto más rápido se mueven estas partículas, mayor es la temperatura. La temperatura se mide comúnmente en grados Celsius (°C) o en Kelvin (K). En la escala Celsius, el punto de congelación del agua se establece en 0°C y el punto de ebullición en 100°C, mientras que en la escala Kelvin, 0 K representa el cero absoluto, la temperatura más baja posible, donde las partículas dejan de moverse por completo. A esta temperatura, la energía cinética de las partículas se reduce a su mínimo absoluto. Aunque el cero absoluto es una temperatura teórica y prácticamente inalcanzable, su estudio y comprensión han llevado a importantes descubrimientos en la física y la termodinámica.
Es importante destacar que la temperatura es una propiedad intensiva, lo que significa que no depende de la cantidad de sustancia presente. Por ejemplo, un litro de agua a 25°C tiene la misma temperatura que un vaso de agua a 25°C.
Noticia completa en Muy Interesante.