Dentro de la ruta europea de las farmacias se pueden incluir microcircuitos locales, regionales o nacionales y en este sentido «Aromas Itinerarium Salutis» ha desarrollado con financiación de la Generalitat Valenciana y apoyo del Muy Ilustre Colegio de Farmacéuticos de València, el más antiguo de Europa, el proyecto «La ruta de las farmacias históricas y los jardines medicinales en la Comunitat Valenciana», que señaliza los emplazamientos en los que estuvieron estas boticas y jardines. Hasta la fecha ya se han señalizado 16 en València, la mayoría en el centro histórico.

El objetivo del proyecto es recuperar, visibilizar y defender el milenario pero «olvidado» legado de las boticas, amenazado, como otros comercios antiguos, por nuevos negocios y franquicias, establecimientos de comida rápida o tiendas de complementos.

En Roma, la asociación Aromas ya ha señalizado un itinerario cultural que incluye: áreas arqueológicas (Foro Imperial o la Isola Tiberina); antiguas boticas conservadas, como la «spezieria» del Convento de Santa Maria della Scala, que se mantiene «in situ» y también lla «spezieria» del Monasterio de Santa Cecilia, actualmente conservada en los Museos Vaticanos; antiguos jardines medicinales y hospitales.

Algunas farmacias de València aunque reconvertidas en locales de ocio, tiendas de alquiler de bicis o de «souvenirs», aún mantienen la esencia y decoración original con sus mostradores y anaqueles de madera tallada y los botes de cerámica donde se guardaban las plantas y materia médica empleada a través de los siglos.

La primera en la lista de esta singular ruta de boticas de València es la farmacia del Palau, antigua farmacia Ramón Esplugues Martí. En la plaza de Santa Catalina, a pocos metros de la renovada y turística plaza de la Reina, se encuentra la Farmacia Domingo Greus y cerca, en Sombrerería 3, la Farmacia Costas.

En la calle San Vicente todavía funciona la Farmacia José Andrés y en San Fernando, la de Francisco Yago del Palau. En la plaza del Mercat, hay otras dos boticas, una de ellas transformada en una tienda de bicicletas de alquiler que todavía conserva la cúpula donde aparece representada una alegoría con un libro de farmacopea o el antiguo mostrador de madera labrada, que sigue en uso.

En la ruta se incluyen antiguas farmacias adaptadas a nuevos usos como el actual Café Sant Jaume, en la calle Caballeros 66, cuya barra es el antiguo mostrador de la farmacia y donde se conservan elementos originales como los botes de plantas que conviven con botellas de todo tipo de bebidas y cócteles. La farmacia de Santiago Querol en la calle Salvador, 13 o Blanch en lugar destacado junto a las torres de Serrenos, en el encuentro de la plaza dels Furs con Roteros son otras supervivientes. Otras farmacias se han perdido definitivamente como “La Morera” conocida como farmacia Narciso Loras, en la calle de las Barcas, junto al Teatro Municipal de València, que desapareció entrado el siglo XX.

Las boticas antiguas también se han conservado fuera del centro histórico. La farmacia Vila Ochando en Maestro Gozalvo 13 es una de ellas. Más lejos, en los Poblados Marítimos, encontramos otras dos farmacias que ya no son tales pero que en la que aún pueden verse elementos de la decoración original. Son la farmacia Ricardo Morales, en la calle José Benlliure, 125, y en el 318 de la avenida del Puerto lo que fue la Farmacia Martínez, reconvertida en coctelería.

La ruta valenciana de las farmacias se complementará con una exposición de fotografías que ha partido de la colección de Salvador Raga, autor del libro «101 farmacias valencianas», en la que las fotos antiguas dialogan con otras imágenes actuales. «Con ello se quiere recuperar la memoria de estos establecimientos y la importancia que tuvieron en el paisaje urbano y la vida social de las ciudades hasta mediados del siglo XX», explica la directora de la Asociación «Aromas Itinerarium Salutis», Mª Luisa Vázquez de Ágredos Pascual, directora de Patrimonio de la Universitat de València.

En la capital algunos establecimientos como el café Sant Jaume, que antes era la Farmacia «Cañizares», una de las de mayor tradición de la ciudad, se han volcado con la iniciativa y organizará a partir de enero de 2024 tertulias sobre «arte y medicina».

La decisión del Consejo de Europa sobre la certificación de la «Ruta Europea de las Farmacias Históricas y los Jardines Medicinales», que se conocerá en julio, equipararía como patrimonio cultural la Ruta de las Farmacias a otras tan famosas como el Camino de Santiago.