FUENTE: El Mundo
El cáncer de pulmón supone aproximadamente el 30% de todas las muertes asociadas a los tumores. La mayor parte de los pacientes con cáncer de pulmón desarrollan resistencias a los tratamientos disponibles, por lo que es cada vez más urgente desarrollar nuevas terapias eficaces.
Para poder conseguirlo, es necesario conocer los mecanismos que controlan la formación de este tumor y eso es lo que ha hecho el equipo de Kol Jia Yong, del Instituto de Ciencias del Cáncer de la Universidad Nacional de Singapur, que ha comprobado que un porcentaje nada desdeñable de los tumores de pulmón, entre los que se incluye el cáncer de pulmón de células no pequeñas o no microcítico,contiene mutaciones en un factor de transcripción, el C/EBP, que parece ser que suprime la formación del tumor.
Existe un subgrupo de tumores que tienen una expresión muy baja de C/EBP, pero que sobrexpresaban, es decir, que producen una mayor cantidad de una proteína oncogénica BMI1, que se asocia a una peor supervivencia. El grupo de Kol Jia Yong ha comprobado que se puede bloquear la proteína oncogénica BMI1 de forma eficaz en ratones con un fármaco que se está estudiando en las primeras fases de investigación, tal y como se detalla en el último número de Science Translational Medicine.
Después de estudiar muestras de pacientes con cáncer de pulmón, los investigadores fueron capaces de identificar un subgrupo de tumores con una expresión muy baja de C/EBP y vieron que esos tumores producían una mayor cantidad de la proteína oncogénica BMI1, que se asocia a una peor supervivencia.
Para ver qué pasaba, los investigadores desarrollaron ese tipo de tumor en ratones y vieron que la proteína BMI1 producía y mantenía el crecimiento del cáncer de pulmón donde no se expresaba el factor de transcripción C/EBP. A continuación, trataron a los ratones con un inhibidor específico de BMI1 para reducir el crecimiento del tumor y lo hicieron bloqueando la progresión del ciclo celular, que es lo que hace que se desarrolle un tumor.
Estos hallazgos suponen un gran paso para tratar los tumores de pulmón que ahora carecen de tratamiento, ya que este inhibidor puede convertirse en una terapia para los pacientes que tienen un tipo específico de cáncer de pulmón, donde C/EBP tenga una expresión baja y BMI1 alta. Por ahora funciona en ratones, habrá que esperar para ver qué pasa en los pacientes; queda un largo camino, pero ya se han dado los primeros pasos.