Los preservativos son el método anticonceptivo más común para los hombres. La función principal es proteger frente a embarazos no deseados y tiene una eficacia del 98%. Asimismo, reduce el riesgo de contagio de infecciones de transmisión sexual como es el VIH, la gonorrea, la sífilis, la hepatitis B, etc., entre un 80% y un 90%.
A la hora de adquirir un preservativo, es importante comprarlo en el establecimiento adecuado, es decir, en una farmacia o un lugar que ofrezca ciertas garantías de conservación. Esto quiere decir que la caja de preservativos esté en buen estado, tenga una fecha de caducidad adecuada -con algunos meses vista- y, súper importante, que estén homologados por la autoridad sanitaria y con el marcado CE.
Al igual que ocurre en los lugares donde se compran estos productos sanitarios, los preservativos también se deben conservar correctamente en casa. Esto quiere decir que el envoltorio de aluminio no es resistente al calor, a la luz ni a la humedad excesiva. Por tanto, corremos peligro cuando se guardan en carteras, en baños, en guanteras de coche o directamente en nuestra ropa, siendo susceptibles a temperaturas y a humedad que los pueden deteriorar. Por tanto, de deben guardar en lugares frescos y secos, siendo una buena opción dejarlos en la mesita de noche, cuando estés en casa.
Existe cierto miedo a las roturas de los preservativos debido precisamente a que se pierden los beneficios que estos suponen. Por ello, y para evitar sus principales causas de rotura, se recomienda prestar atención a las siguientes indicaciones:
Uso incorrecto de los lubricantes. Los lubricantes con base oleosa no son compatibles con los preservativos y, sumado a eso, puede provocar irritaciones vaginales. Por lo tanto, se recomiendan los lubricantes con base acuosa que, además de ser compatibles con los preservativos también lo son con los juguetes sexuales. En el caso de los lubricantes, es importante destacar que aquellos con base de silicona son más específicos del sexo anal y en agua y compatible con los preservativos. Sin embargo, en este caso no lo son con los juguetes sexuales. Igualmente, siempre se recomienda el uso de lubricantes para el sexo anal.
Además, para asegurarse de que todo está correcto, ¿cómo puedo comprobar que el condón está íntegro?
Comúnmente, cuando se habla sobre preservativos, solamente se tienen en cuenta los masculinos, no obstante, los internos o femeninos son una alternativa a los tradicionales. Los preservativos proporcionan una mayor grado de autonomía a las mujeres respecto a su fertilidad y sexualidad.
Tienen una estructura diferente que se adapta a la anatomía de las mujeres. Estos están fabricados con nitrilo, un material alternativo al látex y transparente. Está formado por dos anillos flexibles en ambos extremos: el de menor tamaño se introduce dentro de la vagina, mientras que el de mayor diámetro permanecerá en el exterior de la vagina cubriendo los genitales externos de la mujer.
Entre las ventajas de estos preservativos se encuentran:
El farmacéutico, como profesional sanitario puede asesorarte acerca del preservativo o productos sanitarios relacionados con el mismo, más adecuado para tus relaciones sexuales.