FUENTE: Correo Farmacéutico

La dermatitis del pañal es un motivo bastante frecuente de consulta pediátrica ya que, como afirma Amalia Arce, pediatra en la Fundación Hospital de Nens de Barcelona, "casi todos los bebés en un momento u otro la padecen". Las características de la piel del bebé, junto a la humedad frecuente de la zona, son los factores que suelen propiciar su desarrollo. También, según la pediatra, "el aumento de la frecuencia de las deposiciones o cuando éstas son más ácidas, como ocurre por ejemplo en el caso de las gastroenteritis".

Añade Nicole Knöpfel, del Grupo Español de Dermatología Pediátrica de la Asociación Española de Dermatología y Venereología (AEDV), que los pacientes con incontinencia urinaria o fecal debido a problemas neurológicos o defectos anatómicos, estarían predispuestos, por su parte, "a presentar formas clínicas más severas".

Para evitar su aparición y reducir la frecuencia de la misma, juega un papel fundamental la prevención. En ese sentido, Knöpfel recomienda realizar "una buena higiene de la zona, que debe permanecer siempre seca y limpia". Para la limpieza de la parte del cuerpo del bebé cubierta por el pañal, la portavoz de la AEDV aconseja el uso de "agua tibia y un jabón suave, desaconsejándose el uso de toallitas limpiadoras con detergentes o perfumes".

Otro aspecto básico para la prevención es el cambio del pañal de forma "frecuente". Incluso, a ser posible, "evitando el uso de pañales durante algunas horas al día", ya que según afirma Knöpfel, "se ha demostrado que el número de cambios de pañal diarios es el factor más importante en la prevención de la dermatitis del pañal".

Por último, como medidas preventivas, para la dermatóloga estaría también "la aplicación de productos protectores después de la limpieza de la zona, para que la piel quede aislada del contacto con el pañal y las orinas y las heces que se depositen en él". Al respecto, la experta recomienda las "pastas al agua con óxido de zinc" y recuerda que en la actualidad "existen a la venta productos con óxido de zinc con sustancias que inhiben la acción de las enzimas fecales". En cambio, Knöpfel afirma que "no se deben utilizar de forma profiláctica productos tópicos con corticoides, antifúngicos, ni antibióticos, por el riesgo de sensibilización que conllevan".

Según explica Arce, una vez diagnosticada, para su tratamiento "suele ser suficiente con incrementar los cambios de pañal, no utilizar toallitas, el uso de cremas protectoras y, si se puede, dejar a ratos la zona al aire para que esté seca". En el caso de que existan lesiones más importantes o que sugieran una infección por bacterias u hongos, "habría que utilizar tratamientos más específicos".

Knöpfel, por su parte, recomienda el uso de un corticoide tópico "de baja o moderada potencia que ayude a reducir o eliminar la inflamación". En ese sentido, recuerda que es importante tener presente que "la absorción percutánea de los corticoides en la zona del pañal se ve incrementada por la oclusión".

Por otro lado, la dermatóloga apunta que la sobreinfección por candida albicans es "bastante frecuente", por lo que añade que "siempre" hay que examinar el borde de las lesiones, ya que si presentan pápulo-pústulas en la periferia, está indicada la aplicación tópica de un antifúngico: "En estos casos, la asociación de un corticoide de baja potencia con un antifúngico tópico es de gran utilidad", afirma.

En el caso de que la dermatitis del pañal no se cure a pesar del cumplimiento del tratamiento, Knöpfel recomienda volver a pedir cita con el pediatra porque posiblemente la dermatitis no sea tal "y haya que diferenciarla de otras entidades clínicas".

Por su parte, Mª Luisa Bertomeu, vocal de dermofarmacia del COF de Valencia, reconoce que "este tipo de consultas son muy habituales en farmacia" y que "lo habitual es prescribir las conocidas como pastas al agua con óxido de zinc. Cuando la erosión es más grande e incluso puede haber sangrado, también desde la farmacia se suele preparar eosina al 2 por ciento solución acuosa, que se aplica una vez al día".

¿El pañal influye?

Sobre el tipo de pañal más indicado, Arce hace referencia a una revisión de Cochrane publicada en 2006, en la que no se encontró una diferencia significativa en la probabilidad ni en la severidad de la dermatitis en función del tipo de pañal. No obstante, en el mismo estudio, los investigadores reconocían que faltaban estudios de calidad y que sería necesario que se investigase para medir la presencia y la severidad de la dermatitis asociada al uso de pañal.

Según Knöpfel, serían recomendables los pañales "desechables extrabsorbentes", ya que su uso reduce la frecuencia y severidad de la dermatitis del pañal al contener "materiales absorbentes en gel dentro del núcleo de celulosa con capacidad de absorber varias veces su propio peso de orina y una capacidad de tampón al reducir el pH elevado del área del pañal", que también se asocia con el desarrollo de dermatitis.

En ese sentido, desde 2013 se encuentran a la venta en España pañales ecológicos, "libres de químicos nocivos" y cuya celulosa se blanquea con agua oxigenada, en vez de llevarse a cabo el proceso con cloro, como se hace habitualmente, lo que se traduciría en un descenso de las irritaciones en la zona.