FUENTE: Información
En invierno hay que tomar precauciones para cuidar nuestra vista. El clima frío y seco de los meses invernales puede provocar una baja lubricación, visión borrosa, picazón y ardor. Es importante no olvidar que los ojos son uno de los órganos que tienen mayor contacto con elementos propios del clima tales como el frío, el viento o la contaminación ambiental. Por este motivo, es importante llevar a cabo una serie de medidas de prevención para no sufrir daños oculares en esta temporada invernal.
Además del frío, en los espacios interiores el uso de la calefacción también incide incrementando la sequedad ambiental y los problemas en los ojos produciéndose un aumento de personas que padecen el síndrome del ojo seco.
En cuanto a la exposición a la radiación ultravioleta puede ser peligrosa, puesto que en estos meses el sol se sitúa más bajo y a un ángulo diferente. De hecho, las precauciones con la radiación ultravioleta han de ser mayores en el caso de quienes practican deportes de invierno, puesto que la nieve refleja más del 80% de la luz solar, incluida la radiación ultravioleta, que aumenta un 10% por cada 1.000 metros extra de altura.
El doctor Enrique Chipont, director médico de Oftálica y especialista en oftalmología, explica que "la sobreexposición produce la irritación intensa de la superficie de la cornea y de la conjuntiva y pueden producirse pequeñas úlceras corneales".
El uso de gafas de sol, lágrimas artificiales y el parpadeo frecuente ayuda a proteger los ojos en invierno. Para estos casos, el doctor Chipont recomienda el uso de lágrimas artificiales cuando se note ardor, cansancio o sensación de cuerpo extraño en el ojo. Se aconseja no frotar el ojo y lavarlo con suero fisiológico, supervisar las calefacciones y realizar el uso de humidificadores.
En caso de que cualquiera de los síntomas persista y no se solucione de manera indicada es necesario acudir a un oftalmólogo para evitar que aparezca una afección de mayor gravedad. Cabe recordar que la mejor manera de cuidar nuestros ojos es realizar revisiones periódicamente.
Enfermedades oculares frecuentes que llegan con el frío
Los resfriados y la gripe son otro de los enemigos estacionales más evidentes durante los meses fríos, aumentando su frecuencia debido, en parte, a que la gente está más en casa, cerca de otras personas. Además, muchos de los virus del resfriado se desarrollan en ambientes poco húmedos, haciendo las fosas nasales más secas y más vulnerables a la infección.
Según el doctor Chipont, "la mejor manera para evitar el resfriado es lavarse las manos con frecuencia y evitar el contacto directo con personas que están resfriadas". Cuando esté cerca de alguien resfriado, no se toque la nariz ni los ojos, ya que sus manos podrían estar contaminadas con el virus.