FUENTE: Las Provincias
Septiembre y octubre son meses de ponerse objetivos. Aprender inglés, ver más a los amigos, dejar de fumar y, el vencedor por antonomasia, hacer deporte. Al principio solemos cogerlos con fuerza y voluntad, pero poco a poco ese ímpetu inicial se va desinflando. Cuando pensamos en actividad física, lo primero que nos viene a la cabeza es ir al gimnasio, pero hay otras actividades que servirán para ponerse en forma. Hoy, os proponemos cinco actividades muy diferentes que pueden ayudarte en tu objetivo.
Es real, subir escaleras no solo hará que nos movamos, también nos ayudará a tonificar el tren inferior del cuerpo, es decir, la musculatura de las piernas y de los glúteos, y a mejorar la capacidad cardiorespiratoria. Como recomendación es mejor la columna recta y mover los brazos enérgicamente para ejercitar también esa parte del cuerpo, así como combinar subir y bajar, porque los resultados son diferentes.
Si las escaleras te dan un poco de pereza, aquí otro clásico, andar. Tiene beneficios muy buenos para la salud. Eso sí, hay que hacerlo a un ritmo bueno que nos fuerce un poco. Como explicó Patricia López, licenciada en Ciencias de la Actividad Física y Deporte, «con el simple hecho de salir a caminar a un ritmo rápido entre 20 y 25 minutos al día, cinco días a la semana ya van a poder notar los beneficios. Si, además, mientras andan se esfuerzan por contraer el abdomen y apretar los glúteos, estarán trabajando la zona abdominal y fortaleciendo los músculos al mismo tiempo».
El baile (asistiendo a clases de una manera regular) hace que ejercitemos muchos de los músculos del cuerpo. También mejora la elasticidad, tonifica y mejora la circulación de la sangre.
Existen muchas variedades de esta práctica hindú, pero en cualquiera de ellas va a ejercitar músculos de su cuerpo que no sabía que existían y es probable que tenga agujetas. Entre los beneficios que aporta está la flexibilidad y la fuerza, también ayuda a definir músculos y a tonificar y, sobre todo, a liberar el estrés y practicar la concentración. Cuidado que engancha.
Si todo esto le sabe a poco y lo que le va es, perdone la expresión, que le den caña, pruebe el HIIT. El entrenamiento interválico de alta intensidad es un tipo de entrenamiento basado en la repetición de ejercicios con una intensidad, valga la redundancia, muy alta. Es decir, hacer lo mismo que en una sesión normal pero en menos tiempo. Ayuda a quemar grasa, a ganar elasticidad, a reforzar los músculos y a la pérdida de grasa abdominal.