FUENTE: Infosalus
El sueño corto crónico se asocia con un mayor riesgo de obstrucción de las arterias, enfermedades del corazón y, por lo tanto, de un aumento de la morbilidad y la mortalidad. Una nueva investigación puede haber descubierto por qué la falta de sueño aumenta la susceptibilidad a las enfermedades cardíacas y permite a los médicos identificar a los pacientes que podrían necesitar cambiar sus hábitos antes de que desarrollen la enfermedad.
En la investigación, realizada en la Universidad de Colorado, en Boulder (Estados Unidos) y publicada en 'Experimental Physiology', se comprobó que en los adultos que dormían regularmente menos de 7 horas por noche, los niveles de ciertos microRNAs (moléculas que influyen en la expresión o no de un gen) eran menores. Estas moléculas desempeñan un papel clave en la regulación de la salud vascular y, por lo tanto, ahora se reconoce que los niveles son biomarcadores sensibles y específicos de la salud cardiovascular, la inflamación y la enfermedad. En otras palabras, un nivel más bajo de estas moléculas está asociado con la enfermedad cardíaca, por lo que podrían usarse como biomarcadores para determinar quién es más susceptible a la enfermedad.
Los investigadores evaluaron adultos sedentarios de mediana edad sin cardiopatía del área metropolitana principal local en las ciudades de Denver y Boulder. Se pidió a los sujetos que completaran un cuestionario diseñado para estimar con precisión el promedio del sueño nocturno y se extrajo una pequeña cantidad de sangre de cada sujeto después de un ayuno nocturno para pedir sus microRNAs.
El autor del estudio, Jamie Hijmans, explica que "el vínculo entre el sueño insuficiente y la enfermedad cardiovascular puede deberse, en parte, a los cambios en los microARN. Estos hallazgos sugieren que puede haber una 'huella dactilar' asociada con los hábitos de sueño de una persona, y que las fluctuaciones en los niveles de microRNA pueden servir como una advertencia o una guía para la etapa y la progresión de la enfermedad".