FUENTE: La Razón
Poner freno a la subida del colesterol es uno de los retos a los que se enfrenta actualmente la Sanidad. Los caminos a seguir son varios. Entre las últimas novedades que se barajan destacan unas innovadoras inyecciones semestrales de un medicamento experimental que han demostrado ser efectivas para reducir el colesterol de lipoproteína de baja densidad (LDL), llamado popularmente "colesterol malo", en pacientes que ya tomaban la dosis máxima de estatinas, según datos del ensayo ORION-10, presentado esta semana en las Sesiones Científicas 2019 de la "American Heart Association" (AHA, por sus siglas en inglés).
Hasta que la opción inyectable se convierta en una posible solución, el extracto de levadura roja de arroz ha vuelto a demostrar sus bondades como escudo frente a la hipercolesterolemia. De hecho, un reciente estudio español ha confirmado que un complemento alimenticio a base de este producto es capaz de reducir un 22% el colesterol total, siendo la bajada del LDL de un 29%, mientras que los triglicéridos disminuyen un 22% y la cifra del HDL o "bueno" se incrementa un 5%. "De esta manera, podemos afirmar que el extracto de levadura de arroz rojo no sólo inhibe la producción de colesterol, sino que también interviene como factor de prevención de la arterioesclerosis", asegura Miguel Martín Almendros, médico de familia y miembro del Grupo de Trabajo de Fitoterapia de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria, Semergen.
La novedad del trabajo español, multicéntrico, observacional y prospectivo, reside en que se ha podido corroborar que la levadura roja de arroz tiene dos consecuencias complementarias que son las encargadas de evitar la acumulación de las placas ateromatosas en las arterias. "En concreto, con el consumo de este extracto se logra un efecto antiinflamatorio y otro efecto antioxidante. El primero de ellos evita la inflamación de la íntima, que suele generar arterias rígidas y quebradizas que pueden dar lugar a graves complicaciones para la salud, como por ejemplo derrames cerebrales", detalla Martín Almendros. Pero eso no es todo, ya que, tal y como explica el experto, "el efecto antioxidante resulta esencial, pues incluye la producción de óxido nítrico en el endotelio, lo que permite una vasodilatación. De esta manera logramos un elemento muy positivo y ayudamos a que la sangre fluya con más facilidad, lo que a la larga impide la arterioesclerosi"».
La levadura roja de arroz es un producto obtenido a partir de un fermento que crece sobre este cereal y que "contiene un conjunto de hasta 14 sustancias que se conocen como monacolinas, pertenecientes a la categoría de las estatinas –fármacos para bajar el colesterol–, entre las que destacan la monacolina K y la monacolina L. Cuenta también con ácidos grasos mono y poliinsaturados, fitoesteroles, isoflavonoides y pigmentos que le dan el color rojo", detalla Concha Navarro, catedrática de Farmacología de la Universidad de Granada y presidenta del Centro de Investigación sobre Fitoterapia, Infito.
Pero, ¿cuánto hay que tomar para lograr un efecto positivo en el organismo? "Sería necesario el consumo de 10 miligramos al día de monacolina K, pero lo que ocurre es que, al ser un suplemento alimenticio, la realidad (hay estudios que lo indican) es que su concentración varía mucho de unas marcas a otras. Por eso hay que tener cuidado ya que, por otro lado, su uso puede provocar algunos efectos secundarios leves en algunas personas", advierte Ramón de Cangas, doctor en Biología Funcional y Molecular, académico de número de la Academia Española de Nutrición y Dietética y miembro del Comité Asesor Científico del Consejo General de Colegios Oficiales de Dietistas-Nutricionistas.
En este sentido, los expertos coinciden en que la prescripción médica o farmacéutica, así como un seguimiento del tratamiento resulta esencial, ya que, tal y como apunta de Cangas, "sin justificación, es decir, sin tener niveles de colesterol altos, no tiene sentido consumirlo". Y en esta línea también coincide Almendros, quien asegura que "tomar este tipo de suplementos en algunos casos puede ser simplemente un parche a un problema mayor. El colesterol y la arterioesclerosis son multifactoriales con causas evitables, por eso lo importante es intentar corregir el problema de base desde la consulta de atención primaria, con controles periódicos, buenos hábitos de alimentación y un estilo de vida saludable".