“La dispensación farmacéutica hospitalaria robotizada muestra beneficios y es especialmente una buena oportunidad a valorar para la gestión en pacientes externos”, según concluye un informe que acaba de publicar la Agencia de Calidad y Evaluación Sanitarias de Cataluña (Aquas). También destaca que los sistemas robotizados permiten reorganizar y optimizar los circuitos de almacenamiento, dispensación y control de los medicamentos en los hospitales.
Este informe, sobre la seguridad, el impacto en la organización y el retorno económico de la implantación de la dispensación robotizada de fármacos en hospitales en sustitución de la dispensación no robotizada, se ha realizado dentro del convenio de colaboración entre el Instituto de Salud Carlos III y la agencia catalana, en el marco de la red española de Agencias de Evaluación de Tecnologías Sanitarias y Prestaciones del Sistema Nacional de Salud.
Según constata este trabajo, los sistemas de dispensación robotizada -tanto para pacientes ingresados como externos- disminuyen los errores en la dispensación; mejoran la calidad de la dispensación y la atención farmacéutica; reducen la necesidad de personal de enfermería, de farmacia, administración y de almacén, y también la elección y gestión de stocks farmacéuticos y realización de inventarios.
Para llegar a esa conclusión se ha realizado una revisión sistemática de la literatura sobre la seguridad y los cambios organizativos en el proceso de dispensación en la farmacia hospitalaria a raíz de la implantación de sistemas de dispensación robotizada. El análisis de los estudios identificados se ha visto complementado con la información extraída de una entrevista a los responsables de los servicios de farmacia de hospitales de toda España.
Análisis económico
El análisis económico valoró el retorno de la inversión basándose en modelos diferenciados para cuatro hospitales hipotéticos con 300, 600, 900 y 1200 camas en pacientes ingresados y externos.
El estudio apunta que el retorno de la inversión en la robotización del proceso en pacientes ingresados correspondería (en el caso base) para cualquier número de camas a más de 10 años. El estudio económico complementario muestra que la robotización para el proceso de dispensación en pacientes externos tendría un retorno de la inversión de más de 10 años, 7, 6 y 5 años asociados a hospitales de unas 300, 600, 900 y 1.200 camas respectivamente .
Por otro lado, recomienda que la implantación de la robotización de la dispensación farmacéutica hospitalaria vaya acompañada de una planificación general con objetivos definidos, una recogida protocolizada de resultados mínimos pre y post proceso y la recogida de resultados en salud.