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Los farmacéuticos quieren que los tratamientos para pacientes crónicos vuelvan a renovarse automáticamente, como ocurría durante el estado de alarma decretado por la pandemia, y también poder coordinarse con Atención Primaria ante las numerosas quejas de pacientes que acuden a sus farmacias a por tratamientos que toman de forma habitual y que no pueden llevárselos porque no están prescritos por el médico.

El Consell Valencia de Col-legis de Farmaceutics, que preside el Colegio de Farmacéuticos de Alicante, ha enviado una carta a la consellera de Sanidad, Ana Barceló, con el fin de mejorar la situación y ofrecerse para ser parte de la solución.

"Esta situación está causando problemas críticos en la dispensación de estos tratamientos, que las oficinas de farmacia no pueden realizar sin receta médica", añaden.

Por ello, dicen estar recibiendo "multitud de quejas en los distintos Colegios Oficiales de Farmacéuticos, debido a las protestas recibidas de los pacientes que son dirigidos por parte de los centros de salud a las farmacias para la dispensación de una medicación que no ha sido prescrita".

Y solicitan que "de manera urgente", se habiliten los mecanismos adecuados para solucionar la situación, como la renovación automática de tratamientos, garantizando que todos los pacientes puedan recibir su medicación sin incidencias en las oficinas de farmacia, para lo que deben contar con una prescripción actualizada.

Los farmacéuticos consideran que "habilitando un canal de comunicación entre todos los sanitarios que participan en la labor asistencial se mejoría ésta", canal al que "inexplicablemente no tienen acceso los farmacéuticos comunitarios pese a que tienen que atender diariamente a más pacientes que el resto de sistema asistencial".