FUENTE: La Razón
Después de meses conviviendo con la Covid-19 ha quedado demostrado que el SARS-CoV-2 provoca un desajuste generalizado que desestabiliza los principales órganos vitales. En esta cascada de consecuencias los especialistas investigan ahora cuál es la vinculación entre el nuevo coronavirus y la hiponatremia, «el trastorno hidroelectrolítico más frecuente que se define como la disminución en la concentración de sodio en la sangre», explica David Barajas Galindo, especialista en Endocrinología y Nutrición del Hospital Universitario de León.
Aproximadamente el 30% de los pacientes hospitalizados con neumonía presenta hiponatremia, una vinculación que también parece darse en pacientes Covid-19. «Según los resultados ya disponibles del estudio HOPE (estudio multicéntrico con colaboración española), un 25% de los pacientes hospitalizados por Covid-19 presentan hiponatremia. Al suponer un factor de mal pronóstico en numerosas patologías según los datos que ya disponemos de estudios previos, debe vigilarse de forma especialmente estrecha a estos individuos y estudiar su evolución para sacar conclusiones de lo que puede suponer presentar hiponatremia en el caso concreto de la Covid-19, recalcando que debemos seguir las recomendaciones sanitarias a la hora del aporte de líquidos en estos individuos», detalla Alberto Fernández Martínez, especialista en Endocrinología y Nutrición del Hospital Universitario de Móstoles.
¿Por qué aparece la hiponatremia?
Tal y como advierte Fernández Martínez, «ante numerosas enfermedades infecciosas nuestro organismo puede responder eliminando menos agua por la orina, anticipándose así de forma fisiológica para evitar la deshidratación. Sin embargo, a veces esta respuesta es exagerada y produce hiponatremia. No se trata de un problema de falta de sal, sino de exceso de agua, que puede acumularse en el sistema nervioso y empeorar su funcionamiento».
De hecho, esta reacción adversa del organismo puede provocar graves daños, ya que «lo que nos indica la aparición de hiponatremia es que tenemos un trastorno del metabolismo del agua. No se trata de un problema de falta de sodio, si no que dentro del organismo se ha producido una alteración del equilibrio hídrico, lo que hace que tengamos más cantidad de agua circulando por el torrente sanguíneo de la que sería correcta en una situación de estabilidad, y esto en ocasiones se produce desencadenado por enfermedades subyacentes graves como pueden ser la insuficiencia cardíaca, algunos tipos de cáncer o problemas respiratorios. En todas estas patologías, la hiponatremia se ha mostrado como un marcador de peor pronóstico en diferentes estudios», detalla Barajas Galindo, quien apunta a que «también nos encontramos con situaciones de hiponatremia que son efectos secundarios de fármacos».
La vinculación entre hiponatremia y mortalidad por Covid-19 todavía resulta incierta, pero ya son varias las investigaciones que incluyen este trastorno entre los factores a tener en cuenta. Ambos expertos, miembros del grupo de trabajo de Metabolismo del Agua de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición, SEEN, avanzan que «desde esta sociedad científica estamos participando en distintos estudios que evalúan los datos referentes a la mortalidad. No podemos responder por el momento a cómo afecta la hiponatremia a la mortalidad por Covid-19, pero sabemos por otras patologías que aumenta la mortalidad, la estancia hospitalaria y deteriora la calidad de vida. Es por ello esencial un diagnóstico y tratamiento activo y especializado desde su diagnóstico».
Tratar a tiempo
Para reducir al máximo el mal pronóstico de los pacientes con hiponatremia, resulta imprescindible saber actuar a tiempo frente a esta patología. «Cuando identificamos, por ejemplo, a la infección respiratoria por Covid-19 como causa de la hiponatremia, un tratamiento exitoso de la infección puede contribuir a mejorarla, pero si no es posible, disponemos de fármacos específicos que, con un uso experimentado, son eficaces y seguros», detallan los miembros de SEEN, quienes recuerdan que «la estrategia habitual de tratamiento de la hiponatremia moderada o leve consiste en restringir la cantidad de agua que bebe el paciente, pero en nuestra opinión esta opción no debe emplearse en pacientes Covid-19, que sufren de una infección aguda, que se acompaña de caquexia y pérdida de apetito y hace que a menudo se desnutran empeorando su evolución. En los casos de hiponatremia grave es necesario un tratamiento con suero hipertónico y una vigilancia muy estrecha, en ocasiones debiendo monitorizarse inicialmente a los pacientes en unidades de críticos, ya que es tan importante tratar la hiponatremia como no corregirla demasiado rápido», concluyen.
¿Cuánto sodio hay que tomar al día?
Las necesidades diarias de sodio son de aproximadamente dos mEq por kilo de peso. «Con una dieta equilibrada habitual es más que suficiente para lograr este aporte. Únicamente podríamos tener problema de déficit de aporte de sodio en dietas muy restrictivas en sal, que clásicamente se han empleado para mejorar las cifras de tensión arterial. Tampoco se recomienda incrementar el aporte de sal, pues el problema está relacionado con el exceso de agua y no con el déficit de sodio, por lo que este aumento de ingesta de sal no sería la solución», advierten desde la SEEN.