FUENTE: EFE Salud
La ganancia de peso tras unas Navidades copiosas puede suponer de media entre uno y dos kilos más.
Este aumento de peso a nivel de la sangre se traduce en una mayor concentración de colesterol, con la consiguiente afectación del sistema cardiovascular.
En general, explica a EFEsalud el doctor Calos Macaya, videobloguero en EFEsalud, las fiestas navideñas resultan terribles por las transgresiones de alimentación e ingesta alcohólica.
A ello hay que sumar una climatología poco favorable para salir a caminar y hacer ejercicio.
La subida de colesterol tras las Navidades se debe no solo a que las comidas sean más copiosas sino también a que son más grasas.
No obstante, apunta el doctor Macaya, debido a la pandemia, las personas han celebrado menos comidas y cenas de empresa y de amigos, y en este sentido sería interesante una investigación comparativa respecto a navidades pasadas.
Colesterol y COVID
Según el estudio Euroheart II el colesterol elevado es corresponsable del 60 % de las enfermedades del corazón.
Por ello, la Fundación Española del Corazón (FEC) avisa de la importancia de seguir hábitos higiénico-dietéticos que permitan prevenir su aparición y cuidar la salud cardiovascular.
Y dado el contexto actual, el doctor Macaya urge a “no bajar la guardia” y señala que es fundamental reducir el colesterol cuando se encuentra en exceso.
Colesterol: prevalencia alta
En España su prevalencia es alta, y se estima que la mitad de la población adulta padece hipercolesterolemia.
El problema es que al tratarse de una afección silenciosa, son muchos los que desconocen que la tienen. La única forma de saberlo es con una analítica de sangre.
El colesterol se puede controlar siguiendo una alimentación variada y equilibrada (dieta mediterránea) y practicando ejercicio de intensidad moderada de forma regular.
Buenos hábitos y dieta cardiosaludable
Unos buenos hábitos higiénico-dietéticos y un estilo de vida saludable son fundamentales para combatir el colesterol elevado.
Una adecuada elección de los alimentos es clave para implementar una dieta cardiosaludable.
Tomando como base el patrón de dieta mediterránea, la FEC recomienda:
1.- Incluir a diario y en cantidad suficiente verduras, hortalizas y frutas.
2.- Varias raciones semanales de legumbres.
3.- Preferir cereales integrales en panes o pasta.
4.- Apostar por el aceite de oliva virgen extra y los frutos secos, ricos en grasas saludables.
5.- Incorporar lácteos con esteroles vegetales que ayudan a reducir los niveles de colesterol alto.
6.- Incrementar el consumo de pescado, especialmente el azul (atún, bonito, boquerón, caballa, jurel, palometa, salmón, sardina, etc.) porque contiene un tipo de grasa cardiosaludable, los ácidos grasos omega 3 que ayuda a bajar los niveles de colesterol.
7.- Priorizar las carnes magras y las aves de corral frente a las rojas.
Junto a las recomendaciones dietéticas, reiterar la importancia de practicar actividad física de forma regular y moderada.
También es recomendable mantener buenos hábitos de descanso y una hidratación adecuada.