Fuente: EFE Salud
Aproximadamente 50 millones de personas en el mundo padecen alzhéimer y cada año se diagnostican 9 millones de casos, según los últimos datos de la OMS.
Unas cifras alarmantes que, debido al cada vez mayor envejecimiento de la población, se van a multiplicar en los próximos años, hasta llegar a los 131 millones en 2050.
En España, la prevalencia de la enfermedad de Alzheimer también es alta, aumentando conforme avanza la edad desde el 3,4 % entre los 70 y 74 años hasta el 39 % en los mayores de 90 años.
Sin embargo, los expertos de la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología advierten de que se trata de una enfermedad infradiagnosticada y ponen el foco en la importancia de impulsar un diagnóstico precoz.
El diagnóstico precoz resulta clave para retrasar el desarrollo de la enfermedad y favorecer una mejor calidad de vida a las personas.
Gran impacto en la calidad de vida
La enfermedad de Alzheimer es la forma más común de demencia y constituye una de las principales causas de discapacidad en la población.
El alzhéimer tiene un gran impacto en la calidad de vida de los pacientes y sus familias, en las que recae principalmente la prestación de los cuidados.
Por ello, la SEGG reflexiona en esta fecha sobre la enfermedad y sus consecuencias, centrando la mirada en los progresos en su prevención, tratamiento en el último año y un necesario cambio de mirada.
Valoran como imprescindible un cambio de consideración hacia las personas con demencia, reduciendo el estigma, evitando la exclusión socio-familiar y ofreciendo oportunidades para una mayor participación efectiva en su propia vida y en la vida comunitaria.
Prevención, la mejor herramienta contra la enfermedad
Aunque la edad es el primer y más importante factor de riesgo para desarrollar la enfermedad, existen otros que influyen.
La hipertensión arterial, obesidad, el sedentarismo, el tabaquismo, la diabetes o haber sufrido traumatismos craneoencefálicos aumentan los riesgos.
Muchos de estos factores son modificables, por lo que, en la actualidad, la principal medida contra la enfermedad sigue siendo la prevención.
Se recomienda evitar el consumo de alcohol y tabaco, practicar actividad física diaria, mantener la mente activa e implicarse en actividades significativas y que impliquen relaciones y vínculos interpersonales. Todas ellas son medidas efectivas para preservar la salud del cerebro.
Un hito en el abordaje de la enfermedad de Alzhéimer
Los tratamientos utilizados contra el alzhéimer en la actualidad actúan únicamente sobre los síntomas de la enfermedad, pero no sobre las causas.
Pero el pasado mes de junio, la agencia de regulación de medicamentos estadounidense FDA aprobó el uso de un nuevo fármaco para el tratamiento de la enfermedad de Alzheimer. Se trata del primer fármaco potencialmente modificador del curso de la enfermedad.
Aunque se trata de un hito en la lucha contra esta enfermedad, los expertos llaman a la prudencia ante las las expectativas despertadas por este fármaco.
Las pruebas continúan para evaluar definitivamente los efectos de este tratamiento, cuyo uso no se ha aprobado todavía en Europa.