Fuente: Las Provincias
Hola, buenas, ¿me da paracetamol de un gramo?». «¿Tiene receta?». «No, pero es solo para el dolor de cabeza». «No puedo dárselo, solo le puedo vender cajas de 500 miligramos o de 650». No hacemos la prueba en más farmacias porque nos dirán lo mismo. Ni paracetamol de un gramo ni ibuprofeno de 600 mg (solo de 400). Porque, aunque los tomemos a veces poco menos que como caramelos, no lo son.
Por regla general (aunque cada caso debe ser revisado individualmente) no se recomienda una ingesta mayor de tres gramos de paracetamol al día (tres dosis de un gramo respetando ocho horas entre una toma y la siguiente) y 1.800 miligramos de ibuprofeno (tres tomas de 600 mg). Superar la dosis puede provocar «toxicidad hepática (de hecho, en pacientes con insuficiencia renal no se recomiendan más de dos gramos de paracetamol cada veinticuatro horas) o intestinal en el primero de los casos y toxicidad hepática y cardiovascular (mayor riesgo de ictus o infarto) en el segundo», explica Juana Sánchez, responsable del Grupo de Trabajo de Dolor de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG). Y advierte: «Aunque se suele añadir omeprazol para prevenir hemorragias digestivas en el caso de pacientes con riesgo, esa prevención no elimina el riesgo cardiovascular».
La doctora resuelve dudas y advierte de errores frecuentes en la administración de análgésicos, una manera de automedicarnos muy habitual pero no exenta de riesgos. Graves, incluso.
¿A más dosis, más efecto?
«Es una creencia errónea», zanja la especialista. Y se explica: «La dosis eficaz siempre es la mínima con la que desaparece el dolor. Si tienes dolor de cabeza y con un ibuprofeno de 400 mg se te quita, no te va a ir mejor el de 600 mg. Es más, hay estudios comparativos entre ambas dosis que demuestran una equivalencia analgésica similar. Se administró a pacientes una u otra dosis sin ellos saberlo y los resultados, en cuanto a mejora, fueron muy parecidos entre las personas que habían tomado una dosis más alta y las que tomaron la baja. Otra cosa es que tengas una migraña y con un ibuprofeno de 400 no notes efecto; en ese caso, si al aumentar la dosis a 600 te alivia, tómala».
¿Hay que esperar a que duela?
Sí, pero no demasiado. «Lo más eficaz es tomarlo cuando se inicia el dolor. Si esperamos a que el dolor sea mayor, será más difícil la respuesta analgésica», advierte la doctora Sánchez. E insiste en que 'tomarlo a tiempo' es cuando ya ha empezado a doler, no como prevención. «Hay gente que se va a vacunar y se toma un analgésico antes, por si luego se encuentra mal. No debe hacerse así. Si la vacuna da reacción, entonces sí, pero, hasta que no haya síntomas, no».
¿Por qué alternar?
En casos de cuadros de fiebre, malestar, catarro, infección respiratoria de vías altas..., la recomendación suele ser alternar un analgésico (paracetamol) con un antiinflamatorio (ibuprofeno). «Como entre una dosis y otra del mismo medicamento deben pasar ocho horas, si necesitamos aliviar los síntomas cada cuatro horas, por ejemplo, deberemos alternar ambos. Así mejoramos la eficacia y disminuimos la posible toxicidad».
Dolor menstrual: «Hay mujeres a las que les sirve un paracetamol de un gramo, aunque es más común el ibuprofeno o el naproxeno de 550 mg, más neutro que otros en posibles patologías cardiovasculares, pero con más riesgo digestivo», explica la doctora Juana Sánchez.
Cefalea tensional: «El típico dolor de cabeza local, normalmente localizado en la zona de la nuca, acompañado tal vez de dolor cervical por una contractura muscular fruto de pasar muchas horas delante del ordenador, se puede pasar con un paracetamol de baja dosis».
Dolor de muelas: «Viene bien el nolotil. El problema es que hay pacientes que tienen alergia y no lo saben y pueden desarrollar cuadros muy graves. En algunos países está, de hecho, prohibido, pero en los hospitales españoles se sigue administrando. Yo llevo cuarenta años de profesión y solo me he encontrado dos cuadros graves relacionados con la ingesta de nolotil. Si lo has tomado una vez y no te ha hecho reacción, es seguro tomarlo las siguientes veces. El nolotil también baja muy eficazmente la fiebre». Tanto el paracetamol como el ibuprofeno, el naproxeno y el nolotil están en «la escalera analgésica más baja, que cierra, en el extremo, la morfina, que es el analgésico más potente».
Cólico nefrítico: «Para un cuadro de dolor agudo como este, suele estar indicado el diclofenaco (voltarén), que es un antiinflamatorio».