Fuente: La Sexta
Todavía quedan días de Navidad. Y todavía quedan excesos -comida y roscón de Reyes mediante- por hacer. Sin embargo, es importante que, no sólo ahora sino también durante el resto del año, sepamos disfrutar de las comidas intentando evitar las digestiones pesadas y esas molestias de estómago (ardor, pesadez, hinchazón..) que nos dan cuando nos pasamos con la comida.
¿Será uno de los propósitos de Año Nuevo el intentar cuidar nuestra salud digestiva? Probablemente, durante estos días, esta salud digestiva esté algo tocada por los excesos de las cenas y comidas que estamos haciendo.
Según datos de la Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD), "los españoles suelen ingerir hasta un 30% más de las calorías recomendadas durante las fiestas por los excesos alimenticios con la comida y bebida".
En Navidad -añade esta fundación- solemos abusar de platos y elaboraciones que al ser más calóricas y al contener más grasas y azúcares, pueden derivar "en la aparición de peores digestiones, sensación de malestar, pesadez o alteraciones gastrointestinales como diarrea, náuseas, reflujo o acidez".
Para evitar digestiones molestas cuando vayamos a comer fuera de casa o cuando nos demos una 'comilona' o una comida especial por algún acontecimiento durante este recién estrenado 2022, es importante tener en cuenta, sobre todo, 3 factores.
Según explica a laSexta el Dr. Francisco Botella, endocrino y presidente de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN), cuando realmente empieza el proceso de digestión es cuando la comida "sale" del estómago". Y cuanto más tiempo pase la comida en el estómago peor. Esa mayor permanencia de comida en el estómago es lo que produce esas sensaciones de pesadez, ardor, hinchazón de estómago o náuseas. Así, existen 3 claros factores que pueden hacer que tengamos peores digestiones.
Una de las cosas que debemos tener en cuenta, especialmente en las sobremesas, es el alcohol. Como explica el doctor Botella, beber alcohol después de las comidas puede hacer que lo pasemos peor, sobre todo porque puede que aparezca el famoso reflujo (ardor, malestar o sensación de que la comida se vuelve hacia arriba). Ni 'chupitos' después de la comida, ni nada.
Igualmente, además del alcohol, es importante quitar de la mesa, cuando estamos de sobremesa todos los dulces, bombones y azúcares, porque si no estaremos metiendo todavía más cantidad de azúcares y por tanto, dificultaremos más aún el proceso de digestión. Las grasas, los azúcares y el alcohol harán que tengamos peores digestiones.
Por otro lado, una de las cosas más pronunciadas cuando hablamos de digestión, de mejorar nuestras digestión es el tema de las infusiones. ¿Pero realmente después de una comilona una infusión hará que mejoremos nuestra digestión o al menos, que disminuyan esos síntomas tan molestos? Depende. "Si la infusión se toma con miel o con azúcar, estamos perdidos. Porque de nuevo estaríamos introduciendo más cantidad de azúcar a nuestro estómago", explica el doctor.
"Según determinadas actividades biológica ciertas infusiones, sí podrían ayudarnos a tener menos gases o a facilitar el que tengamos un tránsito más leve. Pero en general no podemos solucionar los destrozos que hemos hecho antes en la comida", sostiene el experto.
Sin embargo, uno de los cosas que más nos puede ayudar después de una 'comilona' es dar un ligero paseo. Entre otras cosas "porque mientras paseamos no estamos en la sobremesa y no estaremos comiendo". Y porque será mejor pasear que no estar tumbados o en el sofá. Eso sí, es importante que sea un paseo ligero, de una intensidad baja y que sea sobre llano. Que no subamos cuestas ni escaleras.
No importa tanto la duración del paseo como la intensidad: "debe ser un paseo leve, ligero y sobre terreno llano", sostiene el doctor. Si por el contrario damos un paseo muy excesivo, con mucha intensidad, podemos tener problemas, puede ser peligroso, sobre todo en personas que tienen problemas cardiacos. Por lo que "es clave que el paseo sea ligero", indica experto.
Es importante que entre los días festivos y más aún después de las Navidades intentemos llevar una alimentación saludable, variada y equilibrada. Es decir, que volvamos a nuestras rutinas habituales y dejemos las comidas y cenas más especiales sólo para los días estrictamente festivos, como explicó en este artículo la nutricionista María Merino.
En esta semana festiva que aún nos queda, y durante el resto del año, es aconsejable que mantengamos unas ciertas rutinas para cuidar nuestra salud digestiva. Algunos consejos que ofrece la FEAD para cuidar nuestra salud digestiva en estas fiestas, y que sirven para el resto de este 2022, son los siguientes: