Fuente: El Mundo

"Deme diez cajas de paracetamol para enviar a Ucrania, por favor". Durante la última semana esta frase se ha repetido en muchas boticas de nuestro país. Los españoles, generosos y solidarios por naturaleza, se han volcado con Ucrania respondiendo a la llamada de numerosos mensajes de Whatsapp que solicitan ayuda en forma de comida, ropa o medicamentos.

A pesar de que las 1001 iniciativas ciudadanas que han surgido para recoger recursos de manera independiente son muy valorables, los expertos en emergencias y las entidades gestoras de esta crisis humanitaria alertan de que todos los envíos de suministros, de cualquier tipo, deben estar coordinados solicitando que se paralicen los envíos independientes. El motivo es evitar que se repitan los errores del pasado, cuando las donaciones no coordinadas generaron montañas de residuos ocasionando un problema añadido a las crisis humanitaria.

¿CUÁL ES LA MANERA MÁS EFICIENTE PARA AYUDAR A UCRANIA?

Existen múltiples organizaciones que ya están trabajando en terreno y que cuentan con la experiencia y estructura para conseguir los recursos de manera más eficiente. La mejor manera de colaborar es la más rápida y sencilla: enviando dinero.

Y es que una de las peculiaridades que tiene la intervención en Ucrania a su favor es su ubicación, siendo frontera con países de la Unión Europea. Hablamos de países como Polonia o Rumanía, con posibilidades de suministro en terreno. Por tanto, cabe plantearse si puede tener mayor coste económico, logístico -y riesgos- llevar la ayuda desde aquí, a 3500 km, o comprar recursos en zonas más cercanas siempre que sea posible y enviarlos a través de los corredores humanitarios que se abren desde esas zonas.

ENVIAR MEDICAMENTOS DE MANERA PARTICULAR NO ES UNA BUENA IDEA

Vaciar tu botiquín casero y depositarlo en un punto de recogida que alguien te ha indicado por Whatsapp no es lo más seguro ni eficiente para ayudar a Ucrania.

Tampoco se deben comprar medicamentos en la farmacia para donarlos. La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) publicó el pasado viernes una nota informativa recordando que la donación de medicamentos debe realizarse únicamente a través de los canales adecuados, con la autorización expresa de la AEMPS, y en ningún caso deben donarse medicamentos devueltos por la ciudadanía. Su envío fuera de los cauces establecidos no solo es ilegal, sino también peligroso al no poder garantizarse la calidad y eficacia de los fármacos.

10 CONSIDERACIONES ANTES DE ENVIAR MEDICAMENTOS DE MANERA INDEPENDIENTE

Estas son diez consideraciones que deben tenerse en cuenta a la hora del envío de medicamentos, según Farmacéuticos sin fronteras y Farmamundi, dos ONG especializadas en ayuda farmacéutica a países en desarrollo, a las que agradecemos enormemente su colaboración en la elaboración de este artículo:

1. Los medicamentos deben ser solicitados por el destinatario de los mismos, nunca los donantes deben decidir qué y en qué cantidades se envía. Con ello evitaremos lo que ya ha ocurrido en otras emergencias: un cúmulo de medicamentos y productos sanitarios que no se han utilizado, que finalmente caducan y que en muchas ocasiones no pueden ser destruidos adecuadamente con el consiguiente impacto medioambiental.

2. Las necesidades de fármacos son cambiantes. En el caso de Ucrania lo más demandado actualmente está siendo material sanitario, material de cura, y en el caso de medicamentos, analgésicos, antibióticos, antiinflamatorios o sueros. Por desgracia aún estamos en el inicio de una emergencia que nos traerá distintas necesidades. Los paracetamoles que se necesitan hoy pueden ser insulinas mañana y por este motivo es importante que los envíos estén centralizados atendiendo a las necesidades concretas de cada momento.

3. Los medicamentos, una vez que salen del canal farmacéutico, incluso comprándolos "de primera mano", no son aptos para su donación ya que no podemos garantizar que hayan sido conservados y manipulados correctamente.

4. Los medicamentos nunca pueden provenir de restos de pacientes. La denominación MNU corresponde a "medicamento no utilizado", es decir, el que tenemos en los botiquines de casa. Una vez terminado el tratamiento, sin ninguna utilidad de uso e incluso caducado, se considera un residuo que nunca se debe donar.

5. El transporte y almacenaje de los mismos hasta destino final debe realizarse de acuerdo a las condiciones de conservación del fabricante (temperatura y humedad).

6. Los medicamentos deben tener una fecha de caducidad suficientemente larga. La OMS marca 12 meses y la AEMPS 15 meses (aunque se considera la posibilidad de reducir este límite en el caso de emergencias).

7. Es aconsejable que los medicamentos estén etiquetados o identificados con la DCI (denominación común internacional). Para entendernos, con el nombre "genérico". La idea es evitar los nombres de fantasía ya que pueden ocasionar confusiones: un mismo nombre de fantasía puede corresponder a dos principios activos o a combinaciones distintas dependiendo del país.

8. Idioma: Hay que tener en cuenta que las donaciones procedentes de España no tendrán el mismo idioma de origen que el de las personas que los van a dispensar. Se debe buscar el mecanismo para que cualquier indicación, así como el principio activo, estén debidamente traducidos en el idioma local. Este punto resulta especialmente relevante en este caso ya que incluso el alfabeto distinto.

9. Donar medicamentos exige un alto grado de especialización ya que deben ser custodiados por farmacéuticos o personal sanitario. Es fundamental conocer los listados de medicamentos autorizados de cada país (por ejemplo, un fármaco tan común como el metamizol no está autorizado en numerosos países) ya que podría ocurrir que un determinado envío no pudiera ser distribuido dentro del mismo

10. Para donar medicamentos se requiere una autorización de exportación por parte de la AEMPS que debe ser realizada por las entidades autorizadas. Las únicas entidades que pueden donar medicamentos son: laboratorios farmacéuticos, entidades de distribución, hospitales y organizaciones no gubernamentales (ONG) y fundaciones de ayuda humanitaria que cumplan con los requisitos establecidos en la normativa que les sea de aplicación. En este caso organizaciones de tipo humanitario.