FUENTE: La Razón
El virus respiratorio sincitial (VRS) es la principal causa de infecciones de vías respiratorias inferiores como la bronquiolitis y neumonía en niños menores de un año y se estima que el 90% de los niños habrá sido infectado por él durante los dos primeros años de vida, incluso sufriendo más de un episodio. En España, provoca el 80% de las bronquiolitis, una infección pulmonar común en bebés y niños pequeños.
La evolución de la enfermedad causada por el VRS es impredecible, la mayoría de los casos son leves y suelen solucionarse tras pocas semanas sin tratamiento, pero en otros puede agravarse la dificultad respiratoria y requerir hospitalización. En nuestro país al menos uno de cada diez ingresos hospitalarios en niños menores de cinco años son por este motivo y el 95% de los casos en menores de dos años ocurren en niños previamente sanos.
Ahora, sendos estudios con un fármaco y una vacuna, ambos en investigación, han obtenido buenos resultados en su objetivo de lograr una protección profiláctica frente al mismo. En el caso del medicamento, el anticuerpo monoclonal nirsevimab, los resultados de un análisis agrupado de los ensayos pivotales de fase 3 Melody y de fase 2b demostraron una eficacia (reducción del riesgo relativo frente a placebo) del 79,5% frente a las infecciones del tracto respiratorio inferior atendidas médicamente, como la bronquiolitis o la neumonía, causadas por el VRS en lactantes nacidos a término o prematuros que se exponían a su primera temporada de VRS.
En un análisis adicional, las muestras de sangre tomadas de los lactantes a los que se les administró nirsevimab mostraron, aproximadamente, anticuerpos neutralizantes frente al VRS 50 veces más altos que los de la línea base, 151 días después de la dosis. Los niveles de anticuerpos neutralizantes frente al VRS se mantuvieron 19 veces más altos que en los sujetos con placebo, sin infección conocida por el VRS hasta el día 361, lo que sugiere que la protección puede extenderse más allá del día 151.
«El VRS es el auténtico covid de los lactantes, cada año colapsa la atención pediátrica en primaria y llena nuestros hospitales con lactantes con insuficiencia respiratoria, frente al cual no tenemos ninguna herramienta preventiva de aplicación general. Con nirsevimab tendríamos, por primera vez, la oportunidad de cambiar el paradigma de atención del VRS, y potencialmente transformar la prevención de una infección que supone la primera causa de hospitalización en el lactante sano», cuenta Federico Martinón-Torres, jefe de Servicio de Pediatría del Hospital Universitario Clínico de Santiago, miembro del Ciber de Enfermedades Respiratorias (CiberRES) e investigador en VRS del Instituto de Investigación Sanitaria de Santiago.
En cuanto a la vacuna, un ensayo, publicado en la revista «NEJM», un ensayo en fase 2b (RSVpreF) ha demostrado que administrada durante el embarazo ha conseguido excelentes resultados. Se trata de un preparado basado en la proteína F en su conformación prefusión que «provocó respuestas de anticuerpos neutralizantes con transferencia transplacentaria eficiente y sin problemas de seguridad evidentes», tal y como recoge el trabajo. Este análisis incluyó a 406 mujeres y 403 bebés; 327 mujeres (80,5%) recibieron la vacuna y la mayoría de las reacciones posteriores a la vacunación fueron de leves a moderadas.