FUENTE: La Razón
Las pruebas de toma de orina y heces son muy comunes ya que son sencillas y proporcionan mucha información sobre la salud de las personas.
1. ¿Qué es y para qué sirve un análisis de muestra de orina?
Esta prueba diagnóstica se usa para detectar y controlar una amplia variedad de trastornos, como infecciones de las vías urinarias, enfermedad renal y diabetes. Un análisis de orina implica examinar el aspecto, la concentración y el contenido de la misma.
2. ¿Qué tipos existen?
Hay tres tipos de análisis de orina según la técnica: el básico, que la recoge en un recipiente estéril y es el tipo más frecuente; el análisis de orina de 24 horas, que recoge toda la orina que se expulsa en un día en un bote; y el análisis con sonda, en el que se emplea una sonda que atraviesa la uretra y llega a la vejiga. Muchas veces se hace de este modo porque el paciente ya está sondado, pero otras se decide porque así se consigue la orina sin contaminar desde la vejiga directamente.
3. ¿Cuáles son los consejos para la recogida de un análisis básico?
Usaremos el recipiente estéril adquirido para la muestra y lo abriremos sin tocar el interior, para mantener la recogida lo más estéril posible. Debemos desechar la primera y última parte de la micción, orinando directamente en el recipiente sin que éste toque la piel ni la ropa. Al finalizar, cierre el recipiente con fuerza para evitar pérdida de la muestra. Es recomendable entregarla lo antes posible. Si no puede en el plazo de una hora debe guardarla en la nevera. La cantidad necesaria es poca, es suficiente con unos 10 ml. Se recomienda evitar algunos alimentos las 24 horas previas, como remolacha, vainilla, plátano o berenjena.
4. ¿Qué es y para qué sirve un análisis de muestra de heces?
Esta prueba diagnóstica consiste en analizar las heces y es una herramienta de gran utilidad en múltiples enfermedades. Sirve para determinar el contenido y el peso de las heces, si hay muchas grasas, pus, moco o sangre, detectar posibles microorganismos que estén causando cuadros infecciosos. Es importante que la persona sea orientada por su enfermera sobre la recolección de la muestra, si debe ser una única o varias, y si después de obtenerlas deben llevarlas al laboratorio para su análisis o conservarla en la nevera para entregarla al día siguiente. Dependiendo del tipo de determinación que le hayan pedido puede ser necesario evitar tomar determinados alimentos, pero en caso necesario se lo indicarían junto con la solicitud de la muestra.
5. ¿Cómo se realiza?
El tipo de contenedor dependerá del tipo de prueba solicitada y de la determinación que vaya a hacerse. Por ejemplo, no es lo mismo el contenedor para parásitos que para determinación de sangre oculta en heces. Puede ser un recipiente similar al de la orina, el cual en ocasiones presenta una cucharilla de plástico para facilitar la recogida o un tubo plano con un líquido que sirve como medio que lleva incorporado un palito para poder tomar la muestra. Deberemos colocar papel higiénico o de periódico debajo del asiento del sanitario para cogerla y colocarnos, si es posible, sentados en sentido inverso al habitual. Si le resulta más cómodo puede utilizar otro recipiente limpio para cogerla (como por ejemplo una cuña o un orinal). En caso de que sea sólida, se recoge entre uno o dos gramos y es importante que se tome en las zonas que observemos sangre, mocos, pus o restos orgánicos. En caso de que sea líquida, es mejor tomar unos 10 mililitros. Para recoger la muestra e introducirla en el recipiente no debe ayudarse de papel higiénico, para ello podremos emplear una cucharilla de plástico. No serán válidas aquellas muestras que estén contaminadas con orina o sangre menstrual. Debe recogerse antes de la toma de medicamentos.