FUENTE: Correo Farmacéutico.
El Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Castilla-La Mancha ha anulado dos resoluciones, una de la Consejería de Salud y Bienestar Social de Castilla-La Mancha y otra de la Dirección Gerencia del Servicio de Salud autonómico (Sescam), que daba instrucciones para desactivar una serie de medicamentos del sistema de prescripción electrónica de recetas en 2010. Así, el tribunal falla a favor de la patronal de la industria innovadora Farmaindustria en su su recurso al entender que el contenido de la resolución "excede con mucho" la capacidad autonómica para dictar instrucciones a médicos y farmacéuticos.
La sentencia apunta que la decisión de excluir fármacos del sistema de prescripción electrónica "condiciona en buena medida la dispensación" y "dificulta y limita la indicación mediante receta electrónica de determinados medicamentos". Como recoge el texto, la instrucción no excluye los fármacos del sistema público de salud (se permite la receta manual), pero sí estaría "afectando de forma directa a la actividad de los laboratorios farmacéuticos".
Buena parte del razonamiento del TSJ castellano-manchego se dirige a la cuestión formal, en tanto que entiende que la resolución "pretendidamente una simple instrucción para impatri consignas de actuación a los subordinados en el servicio público de salud, llamados a ejecutarlas, es mucho más que eso". Entiende que la resolución sería "un acto administrativo" pero el Sescam no habría seguido el procedimiento apropiado, por lo que declara su nulidad.