Envejecer, tener enfermedades de la coagulación, padecer problemas en el hígado o exponerse mucho al sol son algunas de las causas de los moretones que aparecen sin un golpe previo

Los moretones, también conocidos como hematomas, son marcas que se producen cuando hay un derrame de sangre bajo la superficie de la piel. Se forman debido a la rotura de los pequeños vasos sanguíneos llamados capilares.

La sangre se filtra desde los capilares y notamos una coloración en forma de mancha, que suele iniciar en tonos rojos o púrpuras. Con el paso de los días se vuelve azul, luego amarilla verdosa y, finalmente, desaparece. Esto es porque el cuerpo ha reabsorbido la sangre que se había filtrado.

Los traumatismos que no rompen la piel son la razón más habitual de los hematomas. Sin embargo, si no hay un golpe de por medio, las causas de los moretones pueden ser algunas de las siguientes.

1. Envejecimiento

Con la edad, la piel pierde colágeno y elastina, dos proteínas que la hacen resistente. Por lo tanto, se vuelve más delgada.

La reducción en el grosor de la piel significa que los vasos sanguíneos están más cerca de la superficie y son más susceptibles a romperse con presiones leves, como el roce de la ropa.

Noticia completa en Mejor con salud.

Farmacias abiertas y de urgencia más cercanas