Si te estás iniciando en el mundo del running, es muy probable que uno de tus objetivos sea correr más rápido. De acuerdo con los expertos, dos factores que definen la velocidad de carrera son la longitud de tu zancada y la cadencia. Si te preguntas qué es esto último, aquí va una explicación breve: se trata de la cantidad de pasos que puedes dar en un minuto.
Su medición es bastante sencilla. Solo debes contar la cantidad de pasos que das en un minuto con uno de tus pies. Luego, multiplica el resultado que obtuviste por dos y esa será tu cadencia total. Ahora bien, si sueles usar un reloj inteligente o una app para correr, es muy probable que esta métrica ya venga incluida entre sus funciones.
¿Y por qué deberías prestarle atención? En primer lugar, porque saber la frecuencia de tus pasos por minuto puede ayudarte a comprender cómo corres y si puedes hacer más para mejorar tu rendimiento. También porque más que un parámetro, es un ejercicio que beneficia tu salud. A continuación, te contamos por qué es importante, cuál es la cifra considerada «óptima» y qué puedes hacer si deseas mejorarla.
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