FUENTE: El Mundo
España ha vuelto a pulverizar en 2016 su propio récord de donación y trasplante de órganos al alcanzar 43,4 donantes por millón de población (pmp), con un total de 2.018 donantes que han permitido que se realicen 4.818 trasplantes. De esta forma, España se mantiene líder mundial en donación y trasplantes, un titular que lleva varios años repitiéndose y refleja el excelente trabajo de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT).
En 2014 se hicieron un total de 4.360 trasplantes con 36 donantes pmp. En 2015, los trasplantes totales fueron 4.769 y 39,7 donantes pmp. Este año, con 43,4 donantes pmp, se han alcanzado 4.818 trasplantes de órganos sólidos en total. Por órganos, la distribución es 2.994 de riñón, 1.159 de hígado, 281 de corazón, 307 de pulmón, 73 de páncreas y 4 de intestino.
Por segundo año consecutivo, España supera los 100 trasplantes por millón de población, lo que ha permitido reducir también la lista de espera para casi todos los órganos, pasando de un total de 5.673 en 2015 a 5.477 en 2016, 196 menos (22 de ellos niños). De hecho, los ciudadanos españoles son los que más posibilidades tienen en el mundo de acceder a un trasplante cuando lo necesiten.
Los datos se han presentado esta mañana en la misma sede de la ONT, liderada por Rafael Matesanz desde hace 28 años. La ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Dolors Montserrat, ha visitado la organización y ha felicitado a los profesionales por "la excelente labor que realizan".
Para la organización que lidera Matesanz, los buenos resultados se explican por las medidas adoptadas por el sistema español de trasplantes para optimizar la donación, recogidas en la Estrategia 2015. Entre ellas, destaca el fomento de la asistolia y una mayor colaboración entre las UCIS y el resto de servicios hospitalarios, especialmente las urgencias y todas las unidades de críticos.
La donación en asistolia [procede de una persona fallecida por cese de sus funciones cardiorrespiratorias] se afianza como la vía más clara de expansión del número de trasplantes, con un total de 494 donantes, lo que supone un incremento del 57%. La donación por muerte encefálica [cuando se produce el cese completo de la actividad cerebral] sigue siendo la más habitual en nuestro país, pero la donación en asistolia se está expandiendo y ya supone el 24% del total de donantes fallecidos -uno de cada cuatro donantes-.
En el caso del donante en asistolia, al pararse el corazón y dejar de bombear sangre, el oxígeno ya no llega al resto de órganos y se pueden ver dañados. Por tanto, se dispone de menos tiempo para efectuar todo el proceso de donación y trasplante y se necesita que la familia dé su autorización lo antes posible.
Otra de las líneas de trabajo reforzadas que han permitido incrementar el número de donantes es la implicación de los médicos de urgencias. Los donantes detectados en este servicio suponen ya el 24% del total de los hospitales evaluados.
Han descendido, en cambio, los trasplantes renales de donante vivo, con un total de 341 (frente a los 388 del año 2015), quizá por la mayor oferta de trasplante de donante fallecido. Los donantes por accidentes de tráfico se sitúan en un 4,4%, un porcentaje similar al de otros años.
Es importante destacar un dato que también da una idea de las dificultades con las que tiene que lidiar la ONT: el envejecimiento poblacional. Es una de las razones por las que aumentan las listas de espera de pacientes (que el año pasado se consiguieron reducir) y que llevan a buscar alternativas, como las mejoras quirúrgicas y de preservación que han permitido que se incremente enormemente la donación en asistolia, como se ha mencionado. Ese envejecimiento poblacional se refleja también en el perfil de los donantes: más de la mitad (54,6%) supera los 60 años, cerca de la tercera parte supera los 70 y casi un 10% los 80, registrándose el máximo histórico con un donante de hígado de 94 años.
Todas las comunidades autónomas superan por primera vez los 35 donantes pmp. Cantabria lidera el listado por regiones con 65,5 donantes por millón de población, le sigue País Vasco (65,1), Navarra (60,9), Murcia (52,1) y La Rioja (51,6). Tres comunidades están por encima de los 60 donantes pmp, dos por encima de los 50 y nueve por encima de los 40 donantes pmp, que era el objetivo marcado para 2020.
En porcentaje, las regiones con mayor incremento en el número de donantes son Cataluña, País Vasco, Andalucía, Aragón y Murcia. En términos absolutos el orden varía ligeramente: Andalucía, Cataluña, País Vasco, Canarias y Murcia.
La ONT también ha ofrecido datos de la segunda fase del Plan Nacional de Médula. En este área España también ha registrado un récord en el número de donantes en 2016, con 74.397, prácticamente el doble de los alcanzados el año anterior (37.619). Este último año se ha intensificado el ritmo de incorporación de nuevos donantes, con una media de 200 adhesiones al día.
A 1 de enero de 2017 España cuenta con 281.969 donantes de médula ósea (frente a los 207.572 registrados en la misma fecha del año anterior). La segunda fase del Plan Nacional de Médula tiene como finalidad conseguir 400.000 donantes al finalizar 2020, lo que supone una media de 40.000 nuevos donantes en los próximos cinco años, cifra ampliamente superada este año.
Las comunidades autónomas más cumplidoras con los objetivos de esta segunda fase del Plan Nacional de Médula son Andalucía (con un incremento en 2016 del 79%), Aragón (un 63% más), Asturias (45%), Murcia (44%), Galicia (41%), Ceuta (39%) y Melilla (37%).