Sin disponer aún de una vacuna contra el SARS.CoV-2, la comunidad científica se plantea ya qué grupos de población deberían ser los primeros en recibirla en un escenario de escasez.
Varias farmacéuticas que trabajan en distintos proyectos para conseguir una vacuna contra la Covid-19 planean firmar un compromiso conjunto de no sacar al mercado ningún preparado sin haber garantizado del todo que sea seguro y eficaz.
Administrar plasma de pacientes convalecientes de la infección por SARS-CoV-2 podría evitar el empeoramiento de la enfermedad, según resultados preliminares de un estudio español.